El príncipe de Asturias ha suspendido su viaje de dos días a Sao Paulo por una avería en el sistema de funcionamiento de uno de los flaps del avión, que ha obligado a renunciar al despegue. La aeronave, un Airbus A-310 de la Fuerza Aérea Española, estaba preparada para partir de la base aérea de Torrejón de Ardoz en torno a la una de la madrugada, pero, siete horas más tarde, los técnicos no habían logrado completar con éxito la reparación. Ante esta situación, el Príncipe ha declarado a los medios que "es la primera vez que me pasa, y ya tengo unos añitos".
Según informó este lunes el Ejército del Aire, comprobaciones más exhaustivas indicaron un fallo en el sensor de simetría de esa superficie de sustentación en el ala izquierda. Con el fin de acelerar la reparación de la incidencia, se tomó la decisión de sustituir el sensor por uno idéntico de otro A310 del Ejército del Aire que está siendo sometido a una inspección programada en las instalaciones de la empresa EADS en Getafe.
Sin embargo, una vez sustituido el sensor, se vio la necesidad de realizar una calibración precisa y concordante con los otros sensores equivalentes de flaps, que en la plataforma de aparcamiento fue difícil de conseguir, ya que habría que haber utilizado un banco de pruebas, lo que hubiese demorado en bastantes horas el despegue del avión.
Fuentes de la Casa del Rey han explicado que, pese a haberse sustituido la pieza averiada, la reparación exige "una calibración absolutamente exacta" que requiere un tiempo de ajuste del que ahora no se dispone, por lo que el piloto ha decidido suspender el vuelo.
Durante las labores de reparación, el príncipe y la tripulación han permanecido en el interior del avión, mientras que los integrantes de la delegación y los periodistas que acompañaban a Don Felipe han aguardado el resultado de los trabajos en las salas de espera de las instalaciones de la base.
"Ha primado la seguridad"
Un portavoz del Ministerio de Defensa considera que en todo el procedimiento realizado por los técnicos desde que se detectó la avería "ha primado la seguridad por encima de todo", ya que se ha llevado a cabo un "control exhaustivo de la seguridad" del avión.
A su juicio, la detección de la avería en el sensor que provocaba un cortocircuito en uno de los flaps del ala izquierda, algo que es "perfectamente posible que ocurra", significa que "han funcionado los procedimientos para garantizar la seguridad" en el avión.
Oportunidad de negocio
El vuelo tenía una duración prevista de casi once horas y el primer acto de la agenda de Don Felipe en Brasil era una reunión con el gobernador del Estado de Sao Paulo, Geraldo Alckmin, programado en principio para las 14:30 hora local (16:30 GMT).
El objetivo fundamental de esta visita del príncipe de Asturias a Brasil era el desarrollo de oportunidades de inversión y cooperación empresarial, si bien el programa previsto incluía también encuentros con los expresidentes Luiz Inacio Lula da Silva y Fernando Henrique Cardoso, así como un acto de promoción del turismo en España y la presentación de la edición digital en portugués del diario El País.