En China no se han limitado a las agencias matrimoniales convencionales. La empresa Weiqing va más allá con un servicio que consiste en alejar a las amantes molestas para salvar el matrimonio, y que ya ha sido copiado por la competencia.
Desde esta asesoría, aseguran que, frente a la gran mayoría de clientes que en el pasado querían solicitar directamente el divorcio, ahora quieren pelear antes de ceder a las pretensiones de la amante de su marido. Eso sí, la "pelea" cuesta al menos 30.000 euros, cuando se contrata este servicio de eliminación de amantes.
El servicio es caro puesto que requiere de tiempo (puede durar meses), y no hay dos casos iguales: a veces, hay que alquilar un apartamento y hacerse pasar por una vecina que aconseja a la amante; otras, puede tratarse de un hombre, que ha de fingir enamorarse de la amante que ésta deje al marido… incluso puede tratarse de una eliminación basada en ofrecer dinero a cambio de que se olvide de éste. Desde la empresa aseguran que el trabajo lo suelen desempeñar mujeres, porque son más persuasivas.