Kobe Bryant ha dicho, tras disputar un partido amistoso benéfico en Washington, que vestir la camiseta del Barcelona es una sensación "fantástica". "No es la primera vez que la llevo, pero me siento genial", apuntaba la estrella de Los Angeles Lakers en una entrevista para los medios del club catalán.
En los prolegómenos del encuentro, Bryant se mostraba como un aficionado culé más. "Me encanta el FC Barcelona. Todo el mundo lo sabe, es mi equipo favorito desde hace mucho tiempo. Siempre me ha gustado su forma de jugar. El Barça juega como grupo, todos juntos, con creatividad, y juega duro. Admiro mucho estas virtudes", señala.
El partido, organizado por la fundación de Mia Hamm, exjugadora norteamericana y embajadora del Barcelona en Estados Unidos, también ha contado con la participación del exjugador de waterpolo Manuel Estiarte y del director deportivo del club azulgrana, Andoni Zubizarreta, que amargaba la tarde al crack de la NBA con dos paradas.
Además, el partido también ha contado con diferentes personalidades del mundo del espectáculo, periodistas, jugadores de baloncesto y algunas de las futbolistas de la selección de fútbol estadounidense que recientemente fueron subcampeonas en el Mundial de Alemania. Aunque la gran estrella era Kobe Bryant, quien centró las miradas de los miles de asistentes. "Nunca había jugado al fútbol ante tanta gente. Saldré al campo y haré lo que hago siempre. Haré lo que me diga que tengo que hacer Mia Hamm", declaraba el escolta antes de empezar el encuentro.
Una vez comenzado el encuentro, Kobe Bryant intentó soltarse aunque quedó en evidencia que no tiene las mismas habilidades con los pies que con los manos. Eso sí, marcó un gol aunque en la portería equivocada.
Quien demostró no haber perdido la técnica ni el buen juego fue Pep Guardiola, que repartió el juego de su equipo, dio una asistencia y anotó un gol. El partido finalizó con un empate a seis goles.