Los locales realizaron minutos de buen fútbol, imprimiendo la intensidad y la presión que había exigido el técnico, y logró una goleada tal vez excesiva para los méritos hechos por los arlequinados, pero que plasmó la clarísima superioridad del conjunto de Tarragona de cara a gol.
A pesar del cambio de mentalidad que ha querido imponer D'Alessandro a su nuevo equipo, el conjunto que salió decidido a dominar y a buscar la puerta contraria fue el Sabadell. De hecho tuvo dos oportunidades consecutivas en los primeros minutos que llevaron el peligro a la portería de Rubén.
Poco a poco, los locales se fueron asentado tras la embestida inicial de los visitantes, pero con algún que otro problema. La primera ocasión grana fue para Rodri, cuyo remate se marchó desviado.
Los de D'Alessandro se fueron animando y el partido se fue igualando. Un centro de Ramírez hacia Florián volvió a llevar el peligro pasado el cuarto de hora, pero Rubén estuvo muy atento.
Antes de los veinte minutos el Nàstic abrió el marcador. Empezó la jugada Peragón, escorado a la derecha, en la frontal del área. El madrileño cedió para Arzu, que fusiló a De Navas. El portero rechazó pero Morán, atento, puso la bota para enviar al fondo de la red, estableciendo así el 1-0.
Con el gol a favor el Nàstic se empezó a gustar y buscó con ansia el segundo. No en vano era la primera vez en la temporada que el cuadro local se adelantaba en su estadio y estaban siendo los mejores minutos de juego de la temporada.
El Sabadell intentaba mantenerse vivo, sobre todo gracias a las habituales indecisiones de la zaga local. De hecho Rubén tuvo que sacar otra de Florián a los 26 minutos que parecía que iba dentro. Pero el Nàstic impuso su mejor juego un minuto después. Longás la puso en profundidad para Powel, que dentro el área aguantó bien el balón para posteriormente fusilar a De navas, poniendo el 2-0 en el marcador.
El Nàstic salió en la segunda parte dando de nuevo su mejor versión: intensidad y ganas, pero se fue diluyendo con el paso de los minutos. El Sabadell no se rendía pese a la losa del 2-0, y de hecho llevó peligro ante Rubén en más de una ocasión.
Cuando peor lo pasaba el Nàstic, llegó el 3-0. Tras una jugada en ataque de Powel, Morán y Rodri el balón acabó de nuevo en los pies del holandés, que disparó sobre un defensa para que la pelota se desviara a la red. Sin tiempo para similar el tercero, el equipo de D'Alessandro marcaba el cuarto. Powel controlaba dentro del área, que cedía a Tuni, quien entraba completamente sólo por la izquierda del área, para marcar.
Pese a la contundencia del marcador, el Sabadell aún pudo llevar peligro ante Rubén, pero el portero aragonés estuvo inspirado hasta el final del encuentro. Quien no perdonó fue el Nàstic. Con el partido roto, una jugada entre líneas de Longás dejó el balón franco dentro del área a Luna, que establecía el definitivo 5-0.