Problemas para el Barcelona. Por primera vez desde que llegara Pep Guardiola al banquillo, los azulgrana tendrán que ir a remolque del Real Madrid, del que se han situado ya a seis puntos después de la derrota del sábado en Getafe y la victoria de los blancos en el clásico madrileño.
Una distancia que desde luego no es insalvable, porque queda mucha liga, pero que conocían en el Camp Nou desde hace años y, sobre todo, que nunca han vivido con el técnico de Sampedor dirigiendo al equipo.
La cosa toma mayores tintes dramáticos si tenemos en cuenta que el Barcelona visita el Santiago Bernabéu el próximo 10 de diciembre. Es decir, dentro de 15 días. Hasta ahora, Guardiola siempre había disputado el clásico en la capital por delante en la clasificación, con la tranquilidad que ello conlleva. Sin embargo, en esta ocasión será distinto: más que buscar mantener la renta lograda, el Barça deberá pensar en impedir que el Real Madrid se coloque demasiado lejos, casi inalcanzable. Porque nueve puntos en una competición donde los dos conjuntos son tan superiores al resto podría ser demasiada tierra de por medio.
Es por ello que desde la prensa catalana ya han saltado las alarmas, asegurando que los "once puntos perdidos complican la Liga", o que "el cuarto título consecutivo empieza a complicarse quizá en demasía". Hay preocupación en Can Barça.