Menú

Del Bosque piensa en Rodrigo Moreno para la Eurocopa

La lesión de Villa y la baja forma de Torres obligan al seleccionador a buscar alternativas. España necesita gol y podría estar en el Benfica.

La lesión de Villa y la baja forma de Torres obligan al seleccionador a buscar alternativas. España necesita gol y podría estar en el Benfica.

De técnica brasileña innata e inteligencia táctica española adquirida, Rodrigo Moreno ha necesitado marcar doce goles en 1.153 minutos con el Benfica para llamar la atención de los colosos europeos, ser seguido por Vicente Del Bosque y ser referente de la selección olímpica antes de aspirar a un debut soñado con la absoluta.

El delantero nacido en Río de Janeiro en 1991 pero futbolísticamente formado en España, ha demostrado en Portugal que seis meses han sido suficientes para pulir a pasos agigantados el principal hueso de un goleador que se precie: la efectividad. Las dos dianas que sumó anoche frente al Marítimo de Funchal (3-0) sitúan al exjugador del Celta B y del filial del Real Madrid en una media envidiable, un tanto cada 96 minutos, la mejor entre los arietes de referencia en la Liga lusa.

"Soy versátil. Tengo velocidad, técnica y me gusta jugar en el espacio, aunque también puedo atacar el balón de cabeza. Creo que tengo un poco de la cultura del fútbol brasileño y también del español", comentó en una reciente entrevista concedida a la revista del club encarnado.

El zurdo Rodrigo aúna, de hecho, la pericia y habilidad típicas de su Brasil natal con el sentido táctico y el ritmo veloz de su tierra de adopción, España, a la que llegó aún de niño. Esta inusual combinación lo convierte en un punta "total", que como referente único en ataque o como segundo delantero siempre cumple por su capacidad de combinar con los compañeros, su pujanza física (1,80 metros y 74 kilos) y su instinto goleador.

Sus doce dianas -seis en el campeonato, una en Liga de Campeones y cinco en los torneos de Copa- evidencian además varios tipos de factura, desde los oportunos remates en el área pequeña a los fuertes disparos de lejos. No obstante, hasta convertirse en la revelación del fútbol portugués, Rodrigo sudó lo suyo. Después de cinco años repartidos entre el Val Miñor Nigrán y la cantera del Celta, pasó uno en el Real Madrid B, donde anotó cinco goles en 18 partidos.

Ya entonces referente en las categorías inferiores de la selección española -que escogió en detrimento de las de Brasil-, el Benfica echó un órdago por un jugador de entonces 19 años y desembolsó unos seis millones de euros por su pase. En el verano del 2010 llegó a Lisboa, pero el entrenador Jorge Jesús prefirió darle rodaje en el exigente fútbol inglés. En el Bolton, un club de media-baja tabla, el joven Rodrigo apenas sumó un tanto en 17 partidos, pero dejó muy buenas sensaciones.

El último verano Jesús lo repescó. Comenzó sin jugar demasiado, pero a medida que avanzó la temporada fue ganando espacio, tanto que ya ha arrinconado al argentino Javier Saviola y ha puesto varias veces en el banquillo al ariete paraguayo Óscar Cardozo, el mejor goleador extranjero del Benfica con más de 100 tantos. Desde pequeño respiró fútbol -su padre Adalberto jugó en el Flamengo en los 80 y es primo de Thiago Alcántara, medio del Barcelona- y se nota. Nunca se esconde y le gustan los desafíos de alto nivel.

A menos de seis meses de la Eurocopa, Rodrigo acelera y se confiesa: "sueño con estrenarme en la selección española", reconoció en la misma entrevista al club. Sabe que el seleccionador Vicente Del Bosque sigue sus pasos. Y de momento se ilusiona con acudir a los Juegos Olímpicos de Londres con un grupo de futbolistas que aspira a medalla y a tomar el relevo en un futuro cercano de la "generación de oro" del fútbol español.

Su cotización se ha disparado y el Benfica quiere atarlo cuanto antes. El presidente del club, Luís Filipe Vieira, reveló la pasada semana que pretende renovar el contrato del joven un año más, hasta 2016, y aumentar el valor de la cláusula de rescisión, que ahora está fijada en 20 millones de euros. El entrenador Jesús, encantado con Rodrigo, teme que le sucederá lo mismo que a otras estrellas que ha dirigido, como Ángel di María o Fábio Coentrao: "No sé si estará mucho tiempo por aquí", dijo anoche con un tono de resignación.

Temas

En Deportes

    0
    comentarios