La guerra entre el Barcelona y los árbitros, a raíz del caso Piqué, vivía este jueves un nuevo capítulo con las declaraciones de Alfons Godall, vicepresidente del club azulgrana durante la etapa de Joan Laporta, al arremeter contra la política de la Junta directiva que preside Sandro Rosell. "Las buenas relaciones con la Federación, los comités de árbitros y la Liga nos ayudaron", reconoce Godall, quien asegura que la estrategia de Laporta se basó en dar su apoyo a Ángel María Villar como presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF).
"¿A qué presidente apoya Florentino (Pérez)? A Gerardo González. Entonces al Barça le conviene apoyar a Villar y tener una buena relación con la Federación, donde se cuecen los Comités de árbitros, la competición y la Liga de fútbol", revela Godall en declaraciones a La Sexta.
Quien fuera el segundo de Laporta admite también que esa estrategia favoreció los intereses del Barça. "Laporta cultivó mucho y muy a fondo las buenas relaciones con estas instituciones y eso nos ayudó. Tuvo una actuación decisiva en el mandato de Villar", dice Godall, quien asegura no entender la postura adoptada por el Barça en el caso Piqué, tras la decisión del Comité Técnico de Árbitros (CTA) de denunciar al jugador ante el Comité de Competición por su rajada contra el árbitro Velasco Carballo tras el encuentro del pasado sábado ante el Sporting (3-1).
Así, el exvicepresidente barcelonista insta a Rosell a recuperar las buenas relaciones con la Federación. "Tenemos que estar al lado de las entidades en las que se ejerce el poder y no darles la espalda". Además, Godall considera que "esta ausencia (en las instituciones deportivas del fútbol español) está perjudicando al club en términos deportivos".