Soporífero partido en el Bernabéu, donde el Real Madrid ha vuelto a ganar al Espanyol para sellar su pase a semifinales de la Copa del Rey. Tras la ventaja que se traían de Cornellá, donde ganaron por 0-1 merced al tanto de Benzema, los blancos resolvieron pronto la eliminatoria ante los periquitos con el gol de Jesé a los siete minutos.
El equipo madridista buscó ampliar su renta y tuvo muy buenas ocasiones para ello, pero Kiko Casilla -que suena como posible refuerzo del Madrid la próxima temporada- le acabó amargando la noche a Cristiano Ronaldo con grandes intervenciones. En la otra portería, Iker Casillas también se erigió en protagonista al superar el récord de imbatibilidad de Paco Buyo en la portería madridista. 682 minutos lleva ya Iker sin encajar un gol, completando un mes de enero perfecto en el que el Madrid ha ganado todo lo que ha jugado y ha sellado el candado. Con Diego López contribuyendo también a ello.
Carlo Ancelotti modificó sustancialmente el equipo al dar entrada a jugadores como Nacho, Illarramendi, Jesé e Isco. El canario actuó por la banda derecha en el lugar de Gareth Bale, a quien el técnico italiano quiere dar descanso, mientras que el malagueño lo hizo como falso nueve. Por detrás, Di María acompañó a Xabi Alonso e Illarra en el medio centro, manteniendo el 4-3-3 que tan buenos resultados le está dando a Carletto. Javier Aguirre, por su parte, apostó por el once que habitualmente viene utilizando en la Copa, en el que tal vez lo más destacado fue la suplencia de Jhon Córdoba.
Pronto abrió la veda Jesé con un gran gol, tras aprovecharse de un gran pase en largo de Xabi. Y no tardó en entrar en escena Cristiano Ronaldo. Quiso su gol, pero se topó con un sensacional Kiko Casilla. El joven guardameta tarraconense, formado en las categorías inferiores del Madrid, le comió la tostada al portugués con unos cuantos paradones. No era el día del ganador del Balón de Oro 2013. Y tampoco de Di María, ante cuyo disparo también se lució Casilla con otra intervención de mérito a la media hora.
El Espanyol, hasta entonces una comparsa, se creció en los últimos minutos de la primera mitad y empezó a merodear el área de Casillas. En varias ocasiones con el protagonismo de Sergio García, que había sido el mejor de los suyos en la ida de Cornellá.
El conjunto blanquiazul mejoró en defensa tras el paso por vestuarios y apenas concedió espacios a un Madrid que, salvo en muy contadas ocasiones, apenas volvería a pisar área hasta el final. A excepción, eso sí, de lo ocurrido en el minuto 48, cuando Kiko Casilla volvió a amargar a Cristiano con otro paradón de escándalo.
Quedaba todo un mundo por delante y, con la eliminatoria prácticamente resuelta y en medio del sopor generalizado, el resto del partido apenas dejó unos cuantos detalles, como la expulsión de Víctor Sánchez por doble amarilla a los 76 minutos, el récord de imbatibilidad de Casillas o la escasa aportación de Coentrao, que no acaba de aprovechar las oportunidades y que puede tener un pie fuera del Real Madrid de cara a la próxima temporada.
Objetivo cumplido. El de Ancelotti es el primer equipo que se mete en semifinales y ya espera a su rival, que saldrá del vencedor del segundo asalto que Athletic de Bilbao y Atlético de Madrid disputarán en San Mamés. ¿Habrá derbi en la Copa? El miércoles por la noche saldremos de dudas.
Ficha técnica
Real Madrid, 1: Casillas; Arbeloa, Sergio Ramos, Nacho, Coentrao (Pepe, m.72); Xabi Alonso, Illarramendi, Di María (Casemiro, m.85); Jesé, Cristiano Ronaldo e Isco (Morata, m.80)
RCD Espanyol, 0: Kiko Casilla; Raúl Rodríguez, Sidnei, Héctor Moreno, Capdevila; Abraham, Víctor Sánchez, Álex (David López, m.78); Pizzi (Stuani, m.65), Torje (Córdoba, m.46); y Sergio García.
Gol: 1-0, m.7: Jesé
Árbitro: Teixeira Vitienes (Comité cántabro). Expulsó por doble amonestación a Víctor Sánchez (ms.36 y 76). Además, mostró cartulina amarilla a Nacho (m.41) y Cristiano Ronaldo (m.61), del Real Madrid; y a Córdoba (m.79) y a Sergio García (m.87), del Espanyol
Incidencias: Partido de vuelta de cuartos de final de la Copa del Rey disputado en el estadio Santiago Bernabéu ante unos 53.000 espectadores