El presidente del Comité de Árbitros de la Federación Española de Fútbol (RFEF), Victoriano Sánchez Arminio, ha defendido al presidente del organismo federativo, Ángel María Villar, encarcelado desde el pasado 20 de julio dentro de la operación Soule, ordenada por el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz.
"Me da mucha pena que le traten así, ni a un terrorista lo tratan como a él. Los jueces dirán, en este país crucificamos a cualquiera. Pongo la mano en el fuego por Villar", ha dicho el presidente de los árbitros en El Larguero.
En cuanto a las acusaciones del exárbitro Pino Zamorano, que señalaba presiones de la RFEF para apoyar a Villar en una entrevista a El Español, Sánchez Arminio lo niega todo: "Es mentira, pregúntale a cualquier otro árbitro a ver qué dice. Es muy bonito subirse al carro ahora, con todo lo que está ocurriendo".