La selección de Lituania dio buena cuenta en la tarde de hoy de Argentina, favorita para las medallas, al imponerse por un sorprendente 104-85 en un partido donde los de Kestutis Kemzura basaron su triunfo en una primera mitad repleta de acierto desde el perímetro.
Comenzó el partido con Argentina dejando señales de su teórica superioridad, lo que le llevó a tomar las primeras ventajas del choque (8-10). Sin embargo, a partir de ahí, los bálticos empezaron a imprimir su ritmo al partido, que les ha llevado a mantenerse como una de las tres selecciones invictas en el Mundobasket hasta el momento. De la mano de un Kalnietis pletórico en la dirección y anotación, un triple del ex jugador del Joventut y Baskonia, Simas Jasaitis, empezó a vislumbrar que el equipo de Kemzura no había venido de comparsa al duelo (17-11).
El extraordinario acierto exterior de los lituanos, que anotaron sus ocho primeros lanzamientos desde más allá de la línea de seis veinticinco, resultó durante todo el juego una durísima losa para la selección americana, que tras los primeros diez minutos ya cedía por 28-18.
Así, ante la sorpresa generalizada en el Sinan Erdem de Estambul, el festival de los ex soviéticos no hizo sino prorrogarse en el segundo cuarto. Si le faltaba algo a Lituania, su estrella, el NBA Linas Kleiza, empezó a aportar en la anotación tras no haber logrado ningún punto en el primer periodo. Enfrente, sólo Carlos Delfino parecía oponer resistencia, ante el mal día de Luis Scola, que hasta la fecha había sido junto al norteamericano Kevin Durant el mejor jugador de la competición. Así las cosas, el resultado al descanso resultaba tan sorprendente como escandaloso (50-30).
Parecía sensato pensar en una salida en tromba de Argentina tras el descanso, en busca de un imposible. Sin embargo, nada más lejos de la realidad. El rodillo lituano continuó demostrando que, una selección a la que muchos auguraban un triste final en el torneo, se quería ganar por méritos propios un puesto entre los cuatro mejores equipos del mundo. Dos triples de Pocius y Jasaitis elevaron la diferencia a los treinta puntos (66-36). Sergio El Oveja Hernández, seleccionador albiceleste, tiró de último recurso tratando de aliviar la diferencia con una defensa zonal, pero Kleiza tomó el bastón de mano para mantener las distancias, pese al buen momento argentino desde el triple (72-47).
La lógica relajación de los bálticos permitió a su rival llegar a bajar la diferencia en los últimos minutos por debajo de los veinte, merced al acierto del ex jugador del CB Granada Juan Gutiérrez y del NBA Carlos Delfino (91-73). Sin embargo, la cosa no pasó a mayores, y una generación lituana que parecía pensar casi exclusivamente en el Eurobasket que el próximo verano se disputará en su país dio una de las grandes sorpresas del torneo, quizá la mayor hasta el momento, al vencer por un claro 104-85 y clasificarse para las semifinales, donde le espera el gran coco, Estados Unidos.