Pereiro, que a sus 32 años disfruta con su familia del tiempo que no ha tenido desde su debut profesional en 2000, trata de olvidar una temporada aciaga, que empezó en enero con ilusiones renovadas tras la grave caída que le rompió el brazo en el Tour 2008 y que finalizó en la octava etapa de la 'Grande Boucle', al comprobar que no podía estar con los mejores. "No tengo nada que ocultar. Acabo contrato con el Caisse D'Epargne y tengo tres posibilidades: renovar, cambiar de aires o dejarlo. Ésta última posibilidad la contemplo si no encuentro la motivación para seguir, las ganas de montar en bici. Si no se da el caso lo dejo", ha dicho Pereiro.
Con tres puestos entre los diez primeros en el Tour de Francia, aparte de su triunfo en 2006, y abandonos en las dos últimas ediciones, Pereiro entró en crisis de confianza al ver que su trabajo desde su estreno el pasado mes de enero en el Tour Down Under de Australia no le ofrecía el rédito deseado. "Trabajé un montón desde enero y llegué bien al Tour, pero a la hora de responder no me subían las pulsaciones. En la etapa de Envalira traté de meterme en la escapada para ganar la etapa, pero vi enseguida que no iba bien", comenta.
La retirada en el Tour terminó de desesperar a Pereiro. "No fue fácil bajarme de la bicicleta, pero en ese momento estaba asqueado, y a partir de ahí no quería saber nada de la bici", dijo.
El ciclista de Mos admite que se encuentra "sin ilusión por la bicicleta, aunque personalmente bien", por lo que depende de él seguir o no en el pelotón. De momento, ha pactado con el equipo que no estará presente en la Vuelta a España que comienza el 29 de agosto en Assen (Holanda). "Dependerá de mí. Soy sincero y no quiero engañar a nadie. Si me pagan es para devolver con mi trabajo y mi entrega la inversión que hacen en mí. Eusebio Unzue (director del Caisse D'Epargne), quiere que me recupere yo. Si consigo estar a mi nivel puedo ser importante para el equipo, pero si no es así prefiero no seguir", asegura. El objetivo inmediato de Pereiro será "liberar la cabeza, desconectar y estar tranquilo". "Sólo así", asegura, podría "recuperar la motivación".
Sobre la posibilidad de que el Caisse D'Epargne fiche a Alberto Contador, doble vencedor del Tour de Francia, Pereiro se muestrra convencido de que el madrileño nunca se arrepentiría. "Contador es un pedazo corredor y el Caisse D'Epargne se merece un corredor como él porque siempre ha tenido grandes corredores. El grupo y el ambiente es genial y encontraría las condiciones para un corredor de su nivel", concluyó Pereiro.