L D (Agencias) Según el mismo comunicado, el contrato estipula que el grupo Amorim abonará de inmediato un 20 por ciento del valor acordado y el resto de aquí al 30 de enero próximo. La nota explicó que el precio acordado para vender los cerca de 23,66 millones de acciones de EDP en Galp valora la participación en 5.050 millones de euros.
Además, EDP anunció que desde ahora Amorim ocupará su puesto en un acuerdo con la operadora Rede Eléctrica Nacional (REN) de regulación de las "relaciones accionariales en Galp, que persigue la creación de un bloque accionarial de referencia, con significativa influencia en los órganos sociales correspondientes". Entre otras cuestiones, se lee en el comunicado, ese acuerdo "establece el entendimiento de las partes respecto a la ejecución del proceso de transferencia a REN de los activos regulados de gas natural (infraestructura de transporte) y de modo recíproco otorga a ambas partes derechos de opción de compra sobre la participación social propiedad de REN en Galp".
Ello, se precisa, "como medio de asegurar las condiciones necesarias para su futura salida (de REN) del capital social" de Galp. La eléctrica justificó la venta por el hecho de que la participación haya dejado de ser estratégica, tras el fracaso de su intento de comprar el 51 por ciento de Gas de Portugal (GDP) y de la orientación estratégica definida por el Gobierno luso para el sector energético, que contempla la existencia en régimen de competencia de más de un operador integrado en los sectores eléctrico y gasístico.
Con la operación, el grupo Amorim se convierte en cuarto mayor accionista de Galp Energía, después de REN, que posee el 18,3 por ciento, del Estado que controla un 30 por ciento, y de la petrolera italiana ENI, dueña del 33,34 por ciento. ENI dispone de una opción de compra que le permitiría aumentar su participación en el capital de Galp hasta el 43 por ciento, y negocia con el Gobierno el ejercicio de esa opción. Este mismo martes, el presidente ejecutivo de EDP, Joao Talone, declaró que la decisión de vender su participación en Galp debía ser rápida, una semana después de que Amorim hubiese presentado su oferta sobre la misma.
Amorim anunció posteriormente otra oferta a REN por su participación, que de materializarse le situaría entre los mayores accionistas, dentro de una operación conjunta en la que el grupo comprador podría gastar unos 1.600 millones de euros. Además, según los medios de comunicación lusos, el grupo Amorim negocia con Iberdrola Portugal la adquisición de sus acciones en Galp (4 por ciento), para superar el tercio del capital de la petrolera y lograr una minoría de bloqueo en la petrolera, como la que posee la italiana ENI.
Asociado a Sonangol, que gestiona las reservas de hidrocarburos angoleñas, Amorim lanzó una primera oferta sobre el 33,34 por ciento que posee ENI en Galp, que fue rechazada por los italianos. Amorim, líder mundial en producción de tapones de corcho, ha diversificado su campo de acción en los últimos años y ahora abarca sectores tan diversos como turismo, distribución, gestión, casinos, hoteles, tecnología, seguros o importación y exportación, en la mayor parte de ellos con unidades de negocio en España. Amorim es primer accionista individual del Banco Popular español, con una participación cercana al 6 por ciento y desde 2003 está asociado al grupo español Realia en los negocios inmobiliarios.
Además, EDP anunció que desde ahora Amorim ocupará su puesto en un acuerdo con la operadora Rede Eléctrica Nacional (REN) de regulación de las "relaciones accionariales en Galp, que persigue la creación de un bloque accionarial de referencia, con significativa influencia en los órganos sociales correspondientes". Entre otras cuestiones, se lee en el comunicado, ese acuerdo "establece el entendimiento de las partes respecto a la ejecución del proceso de transferencia a REN de los activos regulados de gas natural (infraestructura de transporte) y de modo recíproco otorga a ambas partes derechos de opción de compra sobre la participación social propiedad de REN en Galp".
Ello, se precisa, "como medio de asegurar las condiciones necesarias para su futura salida (de REN) del capital social" de Galp. La eléctrica justificó la venta por el hecho de que la participación haya dejado de ser estratégica, tras el fracaso de su intento de comprar el 51 por ciento de Gas de Portugal (GDP) y de la orientación estratégica definida por el Gobierno luso para el sector energético, que contempla la existencia en régimen de competencia de más de un operador integrado en los sectores eléctrico y gasístico.
Con la operación, el grupo Amorim se convierte en cuarto mayor accionista de Galp Energía, después de REN, que posee el 18,3 por ciento, del Estado que controla un 30 por ciento, y de la petrolera italiana ENI, dueña del 33,34 por ciento. ENI dispone de una opción de compra que le permitiría aumentar su participación en el capital de Galp hasta el 43 por ciento, y negocia con el Gobierno el ejercicio de esa opción. Este mismo martes, el presidente ejecutivo de EDP, Joao Talone, declaró que la decisión de vender su participación en Galp debía ser rápida, una semana después de que Amorim hubiese presentado su oferta sobre la misma.
Amorim anunció posteriormente otra oferta a REN por su participación, que de materializarse le situaría entre los mayores accionistas, dentro de una operación conjunta en la que el grupo comprador podría gastar unos 1.600 millones de euros. Además, según los medios de comunicación lusos, el grupo Amorim negocia con Iberdrola Portugal la adquisición de sus acciones en Galp (4 por ciento), para superar el tercio del capital de la petrolera y lograr una minoría de bloqueo en la petrolera, como la que posee la italiana ENI.
Asociado a Sonangol, que gestiona las reservas de hidrocarburos angoleñas, Amorim lanzó una primera oferta sobre el 33,34 por ciento que posee ENI en Galp, que fue rechazada por los italianos. Amorim, líder mundial en producción de tapones de corcho, ha diversificado su campo de acción en los últimos años y ahora abarca sectores tan diversos como turismo, distribución, gestión, casinos, hoteles, tecnología, seguros o importación y exportación, en la mayor parte de ellos con unidades de negocio en España. Amorim es primer accionista individual del Banco Popular español, con una participación cercana al 6 por ciento y desde 2003 está asociado al grupo español Realia en los negocios inmobiliarios.