La encuesta pone de manifiesto además que el 47% de los conductores ve probable o muy probable la compra de coches de marcas asiáticas, mientras que el 46% se decanta por firmas automovilísticas europeas, informa el diario 'The Detroit News'.
El responsable del sector del Automóvil del Centro de Investigación, Jeff Barlett, aseguró que el número de clientes dispuestos a comprar coches de fabricación nacional es "sorprendentemente alto".
Otra encuesta similar realizada con anterioridad por la consultora californiana AutoPacific cifraba en el 72% la proporción de consumidores que estudian la compra de un vehículo fabricado en Estados Unidos.
"Fervor patriótico"
Para el analista de AutoPacific Ed Kim, "existe un cierto fervor patriótico para ayudar a los vecinos". A su juicio, hay dos tipos de clientes potenciales: los que están decepcionados con General Motors y Chrysler, y los que quieren ayudar a la industria estadounidense.
Las ventas de automóviles en Estados Unidos alcanzaron 1,26 millones de unidades durante el pasado mes de agosto, lo que supone un leve incremento del 1% respecto al mismo mes de 2008 y el primer aumento en los últimos 21 meses, según datos de Autodata Corp.
Este nuevo síntoma de recuperación de la primera economía mundial se explica básicamente por las medidas implementadas por el Gobierno federal para incentivar la demanda, en especial, por el éxito del programa de incentivos al achatarramiento conocido como 'dinero por chatarra'.
No obstante, el mercado automovilístico estadounidense mantiene un fuerte retroceso en los ocho primeros meses del año, con un desplome del 27,9% y un volumen de 7,06 millones de unidades. En tasa anualizada (últimos doce meses), las ventas de coches se sitúan en torno a 14 millones de unidades.