L D (EFE) El organismo se muestra muy preocupado por los avances en materia fiscal, ya que las reformas tributarias y la reordenación del gasto no han sido suficientes y además los vínculos fiscales entre los gobiernos centrales y las regiones "aún son una fuente de tensión en muchos países".
Por ello, el supervisor español señala que a medio plazo "no cabe esperar reducciones drásticas en los niveles de endeudamiento, y el proceso de reducción de la vulnerabilidad financiera será gradual, lo que implica que estas economías seguirán estando potencialmente expuestas a las turbulencias financieras". Las previsiones tampoco son optimistas en cuanto a inversión extranjera, ya que alerta de que los flujos de capitales exteriores destinados a cubrir las necesidades financieras de estos países serán más limitados que los registrados a mediados de los 90.
Ante este panorama, sugiere que los países del subcontinente americano refuercen su atractivo inversor, para lo cual deberán profundizar en el proceso de reformas e impulsar la integración regional. El Banco de España también centra su atención en la recuperación de las tasas de crecimiento, que en su opinión sólo se logrará si se reducen gradualmente las vulnerabilidades de estas economías y si mantienen la capacidad de atracción de capitales externos.
Por ello, el supervisor español señala que a medio plazo "no cabe esperar reducciones drásticas en los niveles de endeudamiento, y el proceso de reducción de la vulnerabilidad financiera será gradual, lo que implica que estas economías seguirán estando potencialmente expuestas a las turbulencias financieras". Las previsiones tampoco son optimistas en cuanto a inversión extranjera, ya que alerta de que los flujos de capitales exteriores destinados a cubrir las necesidades financieras de estos países serán más limitados que los registrados a mediados de los 90.
Ante este panorama, sugiere que los países del subcontinente americano refuercen su atractivo inversor, para lo cual deberán profundizar en el proceso de reformas e impulsar la integración regional. El Banco de España también centra su atención en la recuperación de las tasas de crecimiento, que en su opinión sólo se logrará si se reducen gradualmente las vulnerabilidades de estas economías y si mantienen la capacidad de atracción de capitales externos.