Si a dicha senda de consolidación se le incorpora el efecto de la liquidación del sistema de financiación autonómica el déficit máximo en 2011 pasaría a ser del 3,3% del PIB.
Estos objetivos de estabilidad están condicionados a que las comunidades autónomas presenten o actualicen sus preceptivos planes económico financieros de reequilibrio y a que las medidas incluidas en éstos sean declaradas idóneas por el CPFF (Consejo de Política Fiscal y Financiera).
En el caso de que alguna comunidad no cumpliera este requisito, su objetivo de estabilidad presupuestaria se ajustaría a los límites de déficit estipulados en la ley: el 0,75% del PIB regional en 2011 y equilibrio presupuestario en los ejercicios 2012 y 2013.
Por otro lado, Salgado también informó al CPFF del techo de gasto aprobado la semana pasada en el Congreso de los Diputados, que asciende a 122.256 millones de euros, lo que supone una reducción del 7,7% en comparación con el año anterior.