L D (EFE) La vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández De la Vega, ha indicado que en los próximos meses el Gobierno va a empezar a conceder las frecuencias de televisión digital para que en el plazo de un año estén disponibles unos nuevos 20 programas.
Estos cambios pretenden adelantar la implantación definitiva de la Televisión Digital Terrestre (TDT), de cobertura estatal, hasta 2010, aunque se comenzaría de forma escalonada a principios de 2008 para coincidir con la fecha de lanzamiento de las televisiones autonómicas y locales en sistema digital.
Sin embargo, a pesar de que el Gobierno dice impulsar el paso de la televisión analógica a la digital, este proyecto legislativo también modifica la Ley de Televisión Privada con el fin de suprimir el actual límite de concesiones administrativas, establecido en tres (Antenta3, Tele5 y Canal Plus).
El pasado miércoles, el portavoz de CiU en el Congreso de los Diputados, Josep Antoni Durán Lleida, preguntó al presidente del Gobierno en la sesión de control, si se iba a ampliar el límite de concesiones para televisiones privadas analógicas de cobertura nacional, a lo que José Luis Rodríguez Zapatero afirmó que no lo descartaba siempre que hubiera posibilidades técnicas y fuese aprobado por la Cámara.
Al igual que Josep Antoni Durán Lleida, la Unión de Televisiones Comerciales Asociadas (UTECA) no es partidaria de este cambio legislativo, ya que considera que la concesión de nuevos canales de televisión estatales en analógico perjudicarían la digitalización e introduciría más incertidumbre en el sector.
Otros cambios
Entre las incorporaciones al Proyecto de Ley, en lo que se refiere a radiodifusión sonora el texto, entre otras cosas, establece que una misma persona física o jurídica no podrá disponer de más del 50 por 100 de las concesiones administrativas que coincidan en su ámbito de cobertura ni controlar más de cinco concesiones en ese mismo ámbito. Por lo que respecta a la radiotelevisión por cable se eliminan las restricciones a la competencia ofreciendo la posibilidad de que aparezcan nuevos operadores.
También recoge este texto que los ayuntamientos podrán gestionar, de forma excepcional si se trata de localidades muy grandes, dos de las cuatro cadenas de televisión local, en lugar de una como sucedía ahora, aunque si no lo desean pueden concederlas al sector privado. El proyecto también contempla que las operadoras de televisión local que están operando y que no obtengan las licencias en los concursos convocados, tendrán cuatro meses para dejar de emitir, en lugar de los ocho de la normativa actual.