LD (M. Llamas) Los programas electorales que han elaborado todos los partidos políticos de rango nacional de cara a las próximas elecciones europeas del 7 de junio centran su eje de acción en la crisis económica y financiera. En este sentido, destaca la coincidencia programática de PP y PSOE en cuanto a la necesidad de avanzar hacia una económica centrada en la "sostenibilidad medioambiental".
La única diferencia reseñable entre ambas formaciones consiste en que, mientras que el PSOE aboga por más gasto público para combatir la crisis, el PP insiste en la necesidad de recuperar "cuanto antes" el equilibrio presupuestario. Ambos coinciden, igualmente, en tratar de reforzar los mecanismos de supervisión financiera a nivel europeo y eliminar los paraísos fiscales.
En general, las principales formaciones a nivel nacional articulan un paquete de propuestas económicas envueltas en un discurso políticamente correcto y, por lo tanto, muy general y ambiguo. Pese a ello, es posible destacar algunas medidas concretas de acción que determinan las diferencias clave entre los partidos que se presentan a dichos comicios.
La economía "verde y social" del PSOE
El programa del PSOE se centra en la necesidad de construir una Europa "verde" y "social" capaz de limitar la perjudicial economía de mercado que, según los socialistas, ha causado la actual crisis económica. No obstante, el PSOE argumenta que "estamos ante la crisis de una ideología que ha defendido el provecho individual sin límites, la desregulación, la libertad absoluta para el mercado, la mayor debilidad posible de la intervención pública, la menor protección social, la reducción de impuestos para los más ricos o los escandalosos beneficios a los directivos".
Por ello, los "socialistas españoles trabajaremos por un gran pacto" para crear una economía que sea "medioambientalmente sostenible", que respete los "derechos sindicales" y que evite "competencia desleal dentro de la UE con menor protección o salarios más bajos".
Tal enunciado se traduce, en esencia, en más gasto público, más impuestos, mayor regulación y una apuesta firme por las energías renovables. Y es que, "aunque abundan los negacionistas del cambio climático entre las filas conservadoras, los socialistas somos plenamente conscientes de la necesidad de dar un giro hacia el color verde de nuestro sistema productivo y de nuestra forma de vida", advierte el programa.
El plan anticrisis del PSOE se centra en:
- Elaborar un "ambicioso nuevo Plan de Acción energético para Europa en el horizonte de 2012, en el marco de una Política Energética Europea basada en la sostenibilidad, diversificación de las fuentes y la solidaridad entre los miembros de la Unión en los casos de crisis".
- Para ello, la Unión debe alcanzar un "acuerdo global de reducción de emisiones" para finales de 2009. "Los socialistas españoles promoveremos que Europa esté dispuesta a llegar, como mínimo, al 30%, tendiendo al 40%, en el horizonte de 2020".
- Crear una Estrategia Europea de Desarrollo Rural en la línea de la ley española de Desarrollo Sostenible del Medio Rural -más gasto público y limitación de actividades económicas en función de rígidos criterios medioambientales-.
- Crear un Fondo Europeo de Adaptación a la Globalización: aumento del gasto presupuestario, ayudas públicas a sectores para mantener el tejido productivo.
- Empleo: más recursos públicos para financiar políticas activas de recolocación, aplicar nuevas cargas fiscales para condicionar los beneficios empresariales, así como limitar las bonificaciones de los directivos
- Un Pacto Social Europeo de Progreso: fijar estándares educativos, sanitarios, sociales y de acceso a los servicios públicos comunes para la UE; políticas fiscales suficientes para sostener el Estado del Bienestar -esto es, más impuestos-; y todo ello, contando con la participación de los agentes sociales, "en especial con los sindicatos".
- Reformar el sistema financiero: introducir "más regulación" y "más rigor en su aplicación"; que dicha regulación alcance "a todos los actores del mercado y a sus distintas actividades, y que sea coordinada y armonizada a nivel internacional". El PSOE aboga en este ámbito por crear un "regulador financiero global".
- Banca: otorgar "tratamientos preferenciales" a aquellas entidades financieras que limiten "las retribuciones de sus consejeros y directivos y que contemplen la participación de los trabajadores en los beneficios generados".
- Impedir la existencia de "blindajes" en las empresas de capital público o con ayudas públicas a su pervivencia, así como la "drástica limitación de los mismos y de las remuneraciones excesivas en las empresas privadas".
- Desaparición de los paraísos fiscales, supresión del secreto bancario y el establecimiento de sanciones para los Estados que lo mantengan y se resistan a colaborar en la transparencia internacional.
El "equilibrio presupuestario" y la "sosteniblidad" económica del PP
Por su parte, el PP argumenta que "la izquierda ha preferido siempre sacrificar el equilibrio de las cuentas públicas en aras de sus objetivos políticos. Nosotros, sin embargo, sabemos que el aumento de la deuda pública desembocará en una subida de los impuestos, de los precios y de los tipos de interés que nos impedirá crecer con fuerza cuando la recesión haya terminado".
En este sentido, los populares abogan por aplicar "ayudas públicas temporales" y "focalizadas", velando porque el "Pacto de Estabilidad y Crecimiento se cumpla" -déficit público máximo del 3% del PIB-. Sus medidas económicas clave se centran en:
- Reforma del Pacto de Estabilidad y Crecimiento: "reglas sencillas, claras y de obligado cumplimiento para todos los países"; agilizar los procedimientos por déficit excesivos de forma que "se incremente la presión política sobre aquellos países que incumplan de forma reiterada sus obligaciones presupuestarias".
- Reforma del sistema financiero: "avanzar en la integración de los mercados financieros europeos; supervisión bancaria en la UE liderada por el Banco Central Europeo".
- Banca: aprobar un "reglamento de ayudas de estado al sistema financiero que establezca los límites de los procesos de reestructuración bancaria".
- Paraísos fiscales: "eliminar el secreto bancario dentro de las fronteras de la Unión Europea y en territorios dependientes de la Unión Europea. Asimismo endurecer las restricciones a las transacciones económicas con los territorios que mantenga prácticas de secreto bancario fuera de la Unión Europea". En definitiva, "asegurar el fin de los paraísos fiscales".
- Política monetaria: que el Banco Central Europeo en su política de fijación de los tipos de interés siga atentamente la evolución de la inflación en la zona euro y la evolución de los desequilibrios externos -déficits por cuenta corriente- y los precios de los activos inmobiliarios y bursátiles. Asimismo, el PP apoya la bajada histórica de tipos aplicada hasta ahora por el BCE para evitar la deflación.
- En materia fiscal el PP propone que el IVA se pague en el momento del cobro de la factura y no en la emisión de la misma para que, sobre todo las PYMES y los autónomos, paguen el impuesto cuando realmente hayan cobrado la deuda y no antes; flexibilizar la directiva comunitaria del IVA para poder aplicar beneficios fiscales a sectores estratégicos o muy vulnerables, como por ejemplo el del automóvil; creación de un "IVA verde", que se aplicaría a bienes y servicios que tengan más efecto contaminante.
- Armonizar las bases contables y fiscales del Impuesto sobre Sociedades para reducir costes burocráticos, aumentar la transparencia y la competencia.
- Promover la consecución de un "mix energético diversificado" con una contribución significativa de todas las fuentes bajas de emisiones. Para ello, el PP tan sólo se limita a promover un "debate" en la sociedad europea sobre el uso de la energía nuclear.
- El PP aboga "seguir liderando la lucha mundial contra el cambio climático" bajo el principio de que los países desarrollados asuman un esfuerzo de reducción de emisiones equiparable, las economías emergentes contribuyan también a la reducción y los que están en vías de desarrollo puedan conseguir un progreso sostenible gracias a la transferencia de tecnologías existentes y a los mecanismos flexibles.
- Mantenimiento de una Política Agrícola Común (PAC) "fuerte, que se prolongue más allá del año 2013". En este sentido, el PP aboga por una PAC que fomente el "desarrollo de una agricultura sostenible, de forma que se minimice el impacto sobre el medio ambiente, se mejore la eficiencia productiva".
- Además, el PP defiende la puesta en marcha de "instrumentos de intervención de mercado que aseguren una mayor estabilidad de los precios agrícolas" -precios mínimos- con el fin de garantizar "rentas adecuadas a los agricultores y precios justos a los consumidores".
- "Reforzar la política de Desarrollo Rural" mediante el mantenimiento de ayudas directas; "exigir a las importaciones los mismos requisitos medioambientales y de seguridad alimentaría que deben cumplir los agricultores europeos" lo que, en esencia, supone nuevas trabas al comercio internacional, sobre todo, para los países en vías de desarrollo.
- En materia presupuestaria, el PP defiende mantener el actual nivel de gasto público, ya que proponen que el presupuesto de la Unión no baje del 1,24% de la Renta Nacional Bruta Comunitaria. No abogan por reducir partidas.
- En política social, el PP defiende la Política de Cohesión para "corregir las disparidades de bienestar social y económico entre los distintos territorios y así asegurar la igualdad de oportunidades, y evitar fracturas sociales". "Por eso nos opondremos a cualquier intento de recortar estas políticas".
El ecocomunismo de IU
El programa de IU va mucho más allá en materia económica y medioambiental:
- IU apuesta por aumentar los impuestos directos sobre empresas y personas, así como la armonización fiscal a nivel europeo para evitar la competencia tributaria entre estados.
- La formación comunista propone la polémica Tasa Tobin, esto es tasar las transacciones financieras entre países y abolir los paraísos fiscales. Es necesario introducir "impuestos en el capital especulativo, con el objetivo de acumular recursos económicos para la creación de un Fondo Europeo. Los movimientos de capital, en particular los beneficios que no están directamente relacionados con la inversión y el comercio, deben ser sujetos a control e impuestos".
- Banca pública: "los bienes comunes y los sectores económicos estratégicos, incluyendo el sistema de créditos y el sistema financiero, deben socializarse mediante mecanismos de propiedad y gestión públicas y sometimiento en su actividad a políticas democráticamente aprobadas (nacionalizarse).
- En materia de empleo, IU apuesta por implantar en la UE la jornada laboral de 35 horas semanales, y un máximo de 5 horas extraordinarias; establecer un salario mínimo europeo que represente (al menos) el 60% del salario medio nacional; por último, aboga por establecer una renta mínima de subsistencia -"salario social"- para los parados en edad de trabajar.
- Fiscalidad: acentuar la progresividad de las cargas fiscales, especialmente sobre los más ricos, las grandes empresas y las corporaciones transnacionales; aplicar impuestos globales ecológicos, tales como los impuestos sobre las emisiones de CO2 y sobre el transporte internacional, para contribuir así a frenar el cambio climático y promover la sostenibilidad ambiental.
- Vivienda: "el Estado adquirirá anualmente un paquete de viviendas construidas y que no hayan sido objeto de primera ocupación, en cantidad proporcional a la demanda de viviendas protegidas en cada municipio"; parar evitar la ejecución de las hipotecas, IU propone impedir el desahucio
- Energía: IU se opone frontalmente a la energía nuclear. "La UE debe establecer una moratoria nuclear y el cierre de las centrales nucleares".
- Cambio climático: reducir las emisiones globales un 30% para el 2020 y al menos un 80% para el 2050; aumentar el uso de energías renovables al menos un 25% para el 2020; reducir el consumo de energía primaria un 25% para el 2020, incluyendo una limitación de consumo per cápita.
- Abolir la Directiva Bolkestein, cuyo objetivo es eliminar todos los obstáculos jurídicos que impiden el libre comercio de servicios en la UE.
UpyD pide una "gobernanza económica europea"
- Redirigir el gasto público: aumentar las partidas del gasto común relacionadas con la Estrategia de Lisboa, como el I+D, la mejora del capital humano o la libre movilidad del conocimiento.
- Aumentar el presupuesto: "incrementar los recursos propios mediante un nuevo gravamen sobre las emisiones de CO2". Y es que, el presupuesto común es "muy pequeño, de sólo el 1 % del PIB de la Unión Europea"; UpyD aboga por reformar el Pacto de Estabilidad, dando más flexibilidad a los países con poca deuda pública, para que puedan incurrir en un mayor endeudamiento; eliminar las sanciones a los países incumplan el Pacto en caso de dificultades económicas.
- Política monetaria: flexibilizar el objetivo de inflación, fijado en el tope máximo del 2%. Además, la política monetaria de la UE debería tener en cuenta otros objetivos como la producción y el empleo, no sólo la inflación, al estilo de la reserva Federal de EEUU (FED); el BCE como supervisor bancario.
- UpyD propone mejorar la coordinación de las políticas fiscales entre sí y crear una "gobernanza económica europea".
Por último, Libertas-Ciudadanos apoya una política fiscal y social común que impida en el seno de la UE, poner en marcha un plan de ayudas a sectores industriales y una Europa con "servicios públicos fuertes y eficaces".