L D (EFE) Según consta en la Memoria, el salario agregado percibido el año pasado por los diecinueve miembros del Consejo de Administración del banco ascendió a 22,66 millones de euros, un 7,1 por ciento más que el año anterior, cuando cobraron 21,15 millones.
Botín y Sáenz ganaron, respectivamente, un 6,1 y un 8,6 por ciento más que en 2003, cuando fueron retribuidos con 2,59 millones de euros y 5,75 millones de euros. De acuerdo a estas cifras, el presidente del Santander cobra 850.000 euros menos que el presidente del BBVA, Francisco González, que percibió 3,6 millones el año pasado, pero al tiempo el consejero delegado del banco cántabro percibe más del doble que su homólogo del BBVA, José Ignacio Goirigolzarri, que "sólo" ingresó 2,8 millones.
Además de las retribuciones percibidas el año pasado, que sitúan a Sáenz como el banquero mejor pagado de España, Botín tiene acumulados derechos por pensiones por importe de 10,7 millones de euros, mientras que a su consejero delegado le corresponden 53,78 millones en concepto de pensiones y otro tipo de seguros. Tanto Botín como Sáenz son dos de los diecinueve miembros del Consejo de Administración de la entidad, cuya retribución agregada fue de 22,66 millones de euros en 2004, un 7,1 por ciento más que el año anterior y más del doble que los 10,501 millones de euros que cobraron en 2004 los 15 consejeros del BBVA.
De estos 22,66 millones, 16,17 millones correspondieron a los cinco consejeros ejecutivos -los que trabajan en exclusiva para el Grupo- y que son, además de Botín y Sáenz, el vicepresidente primero, Matías Rodríguez Inciarte, que cobró 3,54 millones de euros; la presidente de Banesto, Ana Patricia Botín, que percibió 2,25 millones, y el responsable de la división de América de la entidad, Francisco Luzón, cuyo salario ascendió a 3,54 millones.
Según la Memoria de la entidad, los emolumentos de los 19 miembros del Consejo de Administración del año pasado supusieron el 0,169 por ciento del beneficio neto atribuido al Grupo en 2004, que ascendió a 3.136 millones de euros. Según consta en la Memoria, los cuatro consejeros externos dominicales -Assicurazioni Generali, Emilio Botín hijo, Javier Botín y la Mutua Madrileña Automovilista- recibieron cada uno 416.000 euros por su colaboración con la entidad en el pasado ejercicio.
Por su parte, los seis consejeros independientes -Fernando de Asúa, Manuel Soto, Guillermo de la Dehesa, Elías Massaveu, Abel Matutes y Luis Alberto Salazar-Simpson- cobraron 1,4 millones y los otros cuatro externos -Antonio Basagoiti, Lord Burns, Rodrigo Echenique y Antonio Escámez- se llevaron 2,5 millones. Durante el ejercicio 2004 hubo cinco vacantes en el Consejo de la entidad: José Manuel Arburúa, el fallecido empresario luso Antonio de Sommer Champalimaud, el hermano del presidente, Jaime Botín, actual primer accionista de Bankinter, y las de Sir George Mathewson y Juan Abelló, que tuvo que renunciar a su cargo tras participar junto a Sacyr en el intento de tomar una posición de control en el BBVA.
El Informe Anual también informa de que al término del ejercicio, Emilio Botín era propietario del 2,035 por ciento del capital del banco, la mitad de lo que controla la totalidad del Consejo de Administración, que asciende al 4,21 por ciento. Sólo dos grandes entidades internacionales constan como propietarias de más de un 5 por ciento del capital del Santander: EC Nominees Limited, con el 7,76 por ciento, y Chase Nominees Limited, con el 6,23 por ciento, aunque en ambos casos como depositarias.
Además de las retribuciones percibidas el año pasado, que sitúan a Sáenz como el banquero mejor pagado de España, Botín tiene acumulados derechos por pensiones por importe de 10,7 millones de euros, mientras que a su consejero delegado le corresponden 53,78 millones en concepto de pensiones y otro tipo de seguros. Tanto Botín como Sáenz son dos de los diecinueve miembros del Consejo de Administración de la entidad, cuya retribución agregada fue de 22,66 millones de euros en 2004, un 7,1 por ciento más que el año anterior y más del doble que los 10,501 millones de euros que cobraron en 2004 los 15 consejeros del BBVA.
De estos 22,66 millones, 16,17 millones correspondieron a los cinco consejeros ejecutivos -los que trabajan en exclusiva para el Grupo- y que son, además de Botín y Sáenz, el vicepresidente primero, Matías Rodríguez Inciarte, que cobró 3,54 millones de euros; la presidente de Banesto, Ana Patricia Botín, que percibió 2,25 millones, y el responsable de la división de América de la entidad, Francisco Luzón, cuyo salario ascendió a 3,54 millones.
Según la Memoria de la entidad, los emolumentos de los 19 miembros del Consejo de Administración del año pasado supusieron el 0,169 por ciento del beneficio neto atribuido al Grupo en 2004, que ascendió a 3.136 millones de euros. Según consta en la Memoria, los cuatro consejeros externos dominicales -Assicurazioni Generali, Emilio Botín hijo, Javier Botín y la Mutua Madrileña Automovilista- recibieron cada uno 416.000 euros por su colaboración con la entidad en el pasado ejercicio.
Por su parte, los seis consejeros independientes -Fernando de Asúa, Manuel Soto, Guillermo de la Dehesa, Elías Massaveu, Abel Matutes y Luis Alberto Salazar-Simpson- cobraron 1,4 millones y los otros cuatro externos -Antonio Basagoiti, Lord Burns, Rodrigo Echenique y Antonio Escámez- se llevaron 2,5 millones. Durante el ejercicio 2004 hubo cinco vacantes en el Consejo de la entidad: José Manuel Arburúa, el fallecido empresario luso Antonio de Sommer Champalimaud, el hermano del presidente, Jaime Botín, actual primer accionista de Bankinter, y las de Sir George Mathewson y Juan Abelló, que tuvo que renunciar a su cargo tras participar junto a Sacyr en el intento de tomar una posición de control en el BBVA.
El Informe Anual también informa de que al término del ejercicio, Emilio Botín era propietario del 2,035 por ciento del capital del banco, la mitad de lo que controla la totalidad del Consejo de Administración, que asciende al 4,21 por ciento. Sólo dos grandes entidades internacionales constan como propietarias de más de un 5 por ciento del capital del Santander: EC Nominees Limited, con el 7,76 por ciento, y Chase Nominees Limited, con el 6,23 por ciento, aunque en ambos casos como depositarias.