LD (Agencias) Las plusvalías generadas por esta operación alcanzarían los 1.400 millones de euros en plusvalías. Los ingresos generados con la operación se destinarán a la adquisición compartida sobre el banco holandés ABN Amro, presentada junto al Royal Bank of Scotland y Fortis. El Santander se quedará como inquilino "a largo plazo" en los 44 edificios que quiere vender y mantendrá una opción de compra sobre ellos.
"La venta le permite aflorar plusvalías, reforzar los fondos propios y liberar recursos para dedicarlos a compras o al negocio financiero. El coste de capital de los recursos inmovilizados supera al del alquiler, que además es fiscalmente deducible", explica el diario El País, que recuerda que entidades de todo el mundo como HSBC, Bank of America o JP Morgan han efectuado operaciones similares.
"La venta le permite aflorar plusvalías, reforzar los fondos propios y liberar recursos para dedicarlos a compras o al negocio financiero. El coste de capital de los recursos inmovilizados supera al del alquiler, que además es fiscalmente deducible", explica el diario El País, que recuerda que entidades de todo el mundo como HSBC, Bank of America o JP Morgan han efectuado operaciones similares.
Pero la operación tiene otras ventajas, como aflorar las plusvalías o reforzar los fondos propios. El diario apunta, además, que "el coste de capital de los recursos inmovilizados supera al del alquiler, que además es fiscalmente deducible".
De hecho, según fuentes del banco español citadas por la agencia de noticias Europa Press "es una operación que se hace porque tiene sentido desde el punto de vista estratégico y es independiente de la operación de ABN".
Tras anunciar el acuerdo de compra, el grupo bancario adelantó su intención de financiar la operecaión con la venta de sus participaciones en Cepsa (30,67 por ciento) y San Paolo-Intesa (1,75 por ciento), con las que podría obtener ingresos de más de 6.800 millones de euros, a los que se sumarían otros 3.150 millones de la venta de activos inmobiliarios.
La entidad presidida por Emilio Botín invertirá un total de 19.900 millones en la compra del banco holandés, mientras que RBS aportará 27.200 y Fortis, 24.000 millones de euros.