L D (EFE) La Generalidad pone en marcha la nueva Agencia Tributaria de Cataluña con la visita del presidente, José Montilla, a las instalaciones de su sede en Barcelona, situada en la calle Fontanella.
De esta forma, la Generalidad de Cataluña se convierte en la primera comunidad autónoma que gestiona sus tributos a través de una Agencia Tributaria propia, un organismo cuya creación contempla el nuevo Estatuto, recurrido por el PP, y cuyo reglamento se aprobó en el Consejo Ejecutivo del pasado 24 de diciembre.
La inauguración simbólica de las instalaciones del nuevo organismo será mañana por parte del presidente de la Generalidad, José Montilla, en un acto al que también asistirá el director del nuevo ente, Josep Costa, y el secretario general del departamento de Economía y Finanzas y presidente de la Agencia Tributaria de Cataluña, Martí Carnicer.
La Agencia Tributaria de Cataluña será un organismo adscrito a la consejería de Economía y su relación con ésta se determinará a través de un contrato programa de carácter plurianual que marcará la orientación estratégica y el criterio de actuación.
El reglamento aprobado el pasado día 24 de diciembre también determina la política de personal de la Agencia Tributaria de Cataluña que "podrá variar a efectos retributivos dependiendo del grado de ejecución de los objetivos fijados", según una nota oficial de la Generalidad.
La Agencia Tributaria tendrá un presidente, la junta de gobierno, que será como un consejo de administración; también habrá un director de la agencia que llevará el día a día del organismo y el comité ejecutivo, que dirigirá la nueva agencia.
Además, habrá un mecanismo de control financiero y de gestión y el presupuesto de la Agencia será de unos 32 millones de euros, con una plantilla de 347 personas que gestionarán más 5.000 millones de euros en tributos propios y de los impuestos totalmente cedidos.
La nueva sede será la de la Dirección General de Tributos, en la calle Fontanella de Barcelona si bien podría trasladarse a una sede más amplia para dentro de tres años, según fuentes de la Generalidad.
De esta forma, la Generalidad de Cataluña se convierte en la primera comunidad autónoma que gestiona sus tributos a través de una Agencia Tributaria propia, un organismo cuya creación contempla el nuevo Estatuto, recurrido por el PP, y cuyo reglamento se aprobó en el Consejo Ejecutivo del pasado 24 de diciembre.
La inauguración simbólica de las instalaciones del nuevo organismo será mañana por parte del presidente de la Generalidad, José Montilla, en un acto al que también asistirá el director del nuevo ente, Josep Costa, y el secretario general del departamento de Economía y Finanzas y presidente de la Agencia Tributaria de Cataluña, Martí Carnicer.
La Agencia Tributaria de Cataluña será un organismo adscrito a la consejería de Economía y su relación con ésta se determinará a través de un contrato programa de carácter plurianual que marcará la orientación estratégica y el criterio de actuación.
El reglamento aprobado el pasado día 24 de diciembre también determina la política de personal de la Agencia Tributaria de Cataluña que "podrá variar a efectos retributivos dependiendo del grado de ejecución de los objetivos fijados", según una nota oficial de la Generalidad.
La Agencia Tributaria tendrá un presidente, la junta de gobierno, que será como un consejo de administración; también habrá un director de la agencia que llevará el día a día del organismo y el comité ejecutivo, que dirigirá la nueva agencia.
Además, habrá un mecanismo de control financiero y de gestión y el presupuesto de la Agencia será de unos 32 millones de euros, con una plantilla de 347 personas que gestionarán más 5.000 millones de euros en tributos propios y de los impuestos totalmente cedidos.
La nueva sede será la de la Dirección General de Tributos, en la calle Fontanella de Barcelona si bien podría trasladarse a una sede más amplia para dentro de tres años, según fuentes de la Generalidad.