General Motors aportará 1.900 millones de euros para sufragar el plan de reestructuración de su filial europea Opel/Vauxhall, que contempla la supresión de 8.300 empleos, 900 de ellos en la planta aragonesa de Figueruelas, anunció hoy el presidente y consejero delegado de Opel, Nick Reilly.
Reilly, que realizó este anuncio en el Salón Internacional del Automóvil de Ginebra, precisó que la aportación de General Motors consistirá tanto en inyecciones de liquidez como en préstamos. De esta forma, la multinacional, que inicialmente preveía aportar 600 millones de euros para la reestructuración, correrá con la mayor parte del coste del plan, que asciende a un total de 3.300 millones de euros.
Este incremento en la aportación era, precisamente, una de las grandes exigencias que le había planteado el Gobierno alemán para darles ayuda ya que las plantas germanas de Opel dan trabajo a casi la mitad de los empleados del grupo en Europa. El otro tema a resolver es el reparto y justificación de los despidos.
De los 3.300 millones a que asciende el coste del plan, General Motors asumirá 1.900 millones. A los 1.400 millones restantes que Opel pedirá a los Gobiernos europeos se suman otros 415 millones adicionales para prevenir el impacto negativo de un desarrollo adverso del mercado.
De esta forma, Opel reducirá de 2.700 a algo más de 1.800 millones de euros el importe de las garantías de financiación que pedirá a los gobiernos de los países europeos implicados en el proceso de reestructuración. Hasta ahora, las estimaciones eran que España debería contribuir con unos 400 millones de euros, una cifra que ahora se debería ver reducida sustancialmente. En todo caso, el ministro de Industria español, Miguel Sebastián, aseguró la semana pasada que nadie de GM les "había pedido cifra alguna"
General Motors destacó que su aportación para la reestructuración de Opel, que representa más del 50% del coste total, supone "un voto de confianza hacia la fortaleza a largo plazo" de su filial europea. La medida permite eludir cualquier riesgo de falta de liquidez durante el proceso de reestructuración a lo largo de este ejercicio.
Así el presidente de la multinacional estadounidense, Ed Whitacre, indicó que para el grupo es "de vital importancia" demostrar el compromiso con las operaciones europeas. "Más allá de los aspectos puramente financieros, lo vemos como un gran paso hacia la inyección de confianza renovada a los clientes, empleados, socios, representantes de los trabajadores, concesionarios y gobiernos europeos", agregó.
El presidente de Opel destacó que la petición de fondos adicionales ya ha sido aprobada por la dirección de General Motors, y la medida ha sido puesta en conocimiento de la Comisión Europea y de los gobiernos de países y regiones implicados en el proceso.
"Valoramos enormemente el creciente apoyo de General Motors, máxime si se tiene en cuenta su alta necesidad de liquidez, así como la reestructuración de las operaciones norteamericanas y la debilidad sostenida del mercado estadounidense", agregó Reilly.
El grupo automovilístico estadounidense General Motors llamará a revisión 1,3 millones de coches en Norteamérica para corregir potenciales problemas en la dirección, relacionados con 14 accidentes en los que hubo un herido, informó la compañía.
El pasado 27 de enero, los responsables de seguridad de la Administración estadounidense decidieron abrir una investigación sobre 905.000 unidades del modelo Chevrolet Cobalt tras recibir 1.100 quejas por problemas en la dirección.
Esta campaña afecta a los Chevrolet Cobalt producidos entre los años 2005 y 2010 y a los Pontiac G5 de entre 2007 y 2010 comercializados en Estados Unidos. Además, la campaña incluye los Chevrolet Pursuit vendidos en Canadá en 2005 y 2006, así como los Pontiac G5 matriculados en 2005 y 2006 en México.
General Motors ha puesto la iniciativa en conocimiento de la Agencia Nacional para la Seguridad del Tráfico (NHTSA por sus siglas en inglés), precisando que la campaña es consecuencia de una investigación abierta el pasado año.
La compañía precisó que a bajas velocidades, los giros con el volante pueden requerir mayor esfuerzo del habitual.