L D (EFE) En un comunicado divulgado este jueves en Fráncfort, el consorcio estadounidense precisa que la eliminación del 95 por ciento de estos empleos deberá haberse completado en 2005 y que para ello entablará inmediatamente negociaciones con los representantes sindicales.
La plantilla de General Motors en sus once plantas europeas tiene 62.000 empleados. Las medidas previstas por este programa de saneamiento "afectarán especialmente a Alemania, sobre todo la producción y el desarrollo de producción, así como otros sectores". Bochum será la planta más afectada en Alemania, donde se dividirá en tres unidades independientes.
Una de las primeras fábricas que puede ser víctima del hachazo es la de Bochum (noroeste alemán), cuya plantilla de 7.600 trabajadores produce los modelos Astra y Zafira. Rüsselsheim, que fabrica los modelos Signum y Vectra cuenta con 5.600 empleados y resultará también afectada por las medidas, mientras que la cadena de montaje de Eisenach (este alemán), donde se construyen el Astra y el Corsa para el mercado nacional, registrará, posiblemente, pocos cambios.
Sin embargo, el comunicado no menciona ningún centro de producción europeo en concreto. "Al coincidir varios factores económicos negativos en los pasados años, nuestros esfuerzos para lograr un cambio de tendencia han fracasado y ahora debemos tomar medidas que van más allá de los esfuerzos hechos hasta ahora", dijo Fritz Henderson, máximo responsable de General Motors en Europa.
Recordó que la compañía no ha tenido más beneficios en Europa desde 1999, lo que ha obligado ahora a su dirección a tomar medidas de profundo alcance para asegurarse el éxito empresarial a largo plazo. Por su parte, Carl-Peter Forster, ex jefe de la marca Opel y actual presidente de General Motors Europa, dijo que las medidas de ahorro abarcarán también los costes de material y de cobertura de garantía y acarrearán una ulterior integración de la producción de las marcas Saab y Opel.
Forster añadió que deberán evitarse redundancias en la coordinación y el reparto en cuanto al desarrollo de productos entre los centros de Suecia, Gran Bretaña y Alemania. Para ello, el Centro Internacional de Desarrollo Técnico en la sede germana de Rüsselsheim (oeste alemán) y el Centro Técnico de Desarrollo de Saab en Trollhattan (Suecia) serán integrados completamente en la organización de desarrollo de General Motors, que dirigirá el actual jefe de Opel, Hans Demant.