LD (EFE) El vicepresidente y consejero delegado de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, ha destacado, al presentar los resultados, que esta evolución positiva se debe al "esfuerzo inversor", a la mejora de la eficiencia, al aumento de la producción eléctrica y al buen comportamiento de las áreas internacional y de renovables.
El beneficio ordinario creció un 15,3 por ciento, hasta 1.698,7 millones de euros, mientras que el resultado bruto de explotación (EBITDA) ascendió a 2.857,7 millones, con un incremento del 9,2 por ciento.
Según Sánchez Galán, la empresa creció en todas las áreas de negocio en términos de EBITDA: Nacional (6 por ciento), Internacional (36,4 por ciento) y Negocios no Energéticos (12,5 por ciento).
Destacan, no obstante, las aportaciones del área Internacional, cuyo EBITDA creció un 36,4 por ciento, hasta los 335,7 millones, y del negocio de renovables, que aumentó su beneficio bruto de explotación un 38,1 por ciento, hasta 258,2 millones.
Iberdrola invirtió 2.713 millones de euros el año pasado, de los que el 80 por ciento se destinó a España (2.186 millones), el 12,1 por ciento a México y el 1,8 por ciento a Sudamérica. Desde que se inició el Plan Estratégico 2002-2006, la compañía ha invertido 10.300 millones. En España, la potencia instalada creció un 11,1 por ciento, hasta 22.547 megavatios. Además, Iberdrola pondrá en marcha dos nuevas centrales de ciclo combinado este año: la de Aceca (Toledo), de 400 megavatios, y el grupo III de Arcos (Cádiz), de 800 megavatios, en julio.
En el área de renovables, la compañía estudia siete proyectos de energía solar térmica y apuesta por nuevas tecnologías como la eólica marina. La entrada en funcionamiento de las nuevas instalaciones permitió que la producción aumentara un 13,9 por ciento a pesar de la menor hidraulicidad (menores recursos hídricos para generar electricidad).
La producción eléctrica creció un 4,1 por ciento en España y un 87,5 por ciento en Latinoamérica. El aumento de la producción en España compensó el descenso de los precios de la electricidad en el mercado mayorista, que cayeron un 1 por ciento. Otro aspecto que influyó en el crecimiento de los resultados fue la mejora de la eficiencia, ya que el margen bruto aumentó un 8,4 por ciento mientras que los gastos operativos sólo se incrementaron un 5,8 por ciento.
El beneficio ordinario creció un 15,3 por ciento, hasta 1.698,7 millones de euros, mientras que el resultado bruto de explotación (EBITDA) ascendió a 2.857,7 millones, con un incremento del 9,2 por ciento.
Según Sánchez Galán, la empresa creció en todas las áreas de negocio en términos de EBITDA: Nacional (6 por ciento), Internacional (36,4 por ciento) y Negocios no Energéticos (12,5 por ciento).
Destacan, no obstante, las aportaciones del área Internacional, cuyo EBITDA creció un 36,4 por ciento, hasta los 335,7 millones, y del negocio de renovables, que aumentó su beneficio bruto de explotación un 38,1 por ciento, hasta 258,2 millones.
Iberdrola invirtió 2.713 millones de euros el año pasado, de los que el 80 por ciento se destinó a España (2.186 millones), el 12,1 por ciento a México y el 1,8 por ciento a Sudamérica. Desde que se inició el Plan Estratégico 2002-2006, la compañía ha invertido 10.300 millones. En España, la potencia instalada creció un 11,1 por ciento, hasta 22.547 megavatios. Además, Iberdrola pondrá en marcha dos nuevas centrales de ciclo combinado este año: la de Aceca (Toledo), de 400 megavatios, y el grupo III de Arcos (Cádiz), de 800 megavatios, en julio.
En el área de renovables, la compañía estudia siete proyectos de energía solar térmica y apuesta por nuevas tecnologías como la eólica marina. La entrada en funcionamiento de las nuevas instalaciones permitió que la producción aumentara un 13,9 por ciento a pesar de la menor hidraulicidad (menores recursos hídricos para generar electricidad).
La producción eléctrica creció un 4,1 por ciento en España y un 87,5 por ciento en Latinoamérica. El aumento de la producción en España compensó el descenso de los precios de la electricidad en el mercado mayorista, que cayeron un 1 por ciento. Otro aspecto que influyó en el crecimiento de los resultados fue la mejora de la eficiencia, ya que el margen bruto aumentó un 8,4 por ciento mientras que los gastos operativos sólo se incrementaron un 5,8 por ciento.
El Consejo de Administración de Iberdrola propondrá a la Junta de Accionistas el pago de un dividendo total, con cargo al ejercicio 2004, de 0,768 euros por acción, lo que representa un aumento del 14,3 por ciento.