En una rueda de prensa para presentar los resultados de 2009, el consejero delegado de Iberia, Rafael Sánchez Lozano, explicó que esta decisión se ha tomado por una necesidad urgente de transformar las rutas en estos dos segmentos, debido a la competencia de las aerolíneas de bajo coste. El presidente de Iberia, Antonio Vázquez, explicó que la compañía no puede quedarse impasible ante la competencia de este tipo de operadores que dejan fuera del mercado de corto y medio recorrido a las aerolíneas tradicionales.
Debido a la caída de la demanda generalizada, Iberia redujo el pasado año la capacidad un 6% en toda su red, mientras que el recorte en el mercado nacional fue del 11% y en el europeo, del 10,6%.
“Ganar la liga”
Respecto a la fusión con British Airways, Vázquez aseguró que es tan sólo el primer paso en un proceso de consolidación del sector del transporte aéreo mundial que permitirá a la compañía "no sólo jugar en la primera división, sino ganar la liga".
También añadió que el mapa mundial de compañías aéreas, todavía muy fragmentado, cambiará radicalmente, con la aprobación del acuerdo de cielos abiertos entre Europa y EEUU, e Iberia, gracias a su fusión con BA, podrá ir sentada en el asiento del conductor cuando esto se produzca.
En cuanto al proceso de fusión, el presidente de Iberia explicó que el acuerdo se firmará en próximas semanas y que se mantiene el calendario previsto para la fusión definitiva, es decir a finales de 2010.
No obstante, la fusión queda sujeta al acuerdo que alcance BA respecto a su fondo de pensiones, cuyo déficit ronda los 4.000 millones de euros.