LD (EFE) Con esta caída, el mercado español acumula un retroceso semanal del 0,56 por ciento y suma dos semanas consecutivas en negativo tras la anterior racha de siete semanas en positivo. El Índice General de la Bolsa de Madrid cayó el 0,19 por ciento respecto al jueves y el 0,59 por ciento en los últimos cinco días, mientras que el tecnológico Nuevo Mercado bajó este viernes el 0,68 por ciento y en la semana cedió el 2,62 por ciento.
Pese al encarecimiento del crudo y el mal despertar de Wall Street, el resto de bastiones europeos se decantaron en la recta final del día por las ganancias, apoyadas en sus valore energéticos y las competidoras de Microsoft, condenada a pagar 1.500 millones de euros a Alcatel-Lucent. Los avances fueron más abultados en el caso de Fráncfort (0,27 por ciento) y Londres (0,32 por ciento) y más discretos en el de París (0,15 por ciento) y Milán (0,02 por ciento).
Los mercados del Viejo Continente comenzaron la última sesión de la semana con avances, apoyados en el imparable ascenso del Nikkei, que se encuentra en máximos de siete años y vive ajeno a los factores que presionan a la baja a los mercados de renta variable, como la subida de tipos o el encarecimiento del petróleo. En Europa destacó la inesperada caída de la confianza empresarial en febrero en Alemania, que consiguió dar la vuelta a las bolsas.
Pese al encarecimiento del crudo y el mal despertar de Wall Street, el resto de bastiones europeos se decantaron en la recta final del día por las ganancias, apoyadas en sus valore energéticos y las competidoras de Microsoft, condenada a pagar 1.500 millones de euros a Alcatel-Lucent. Los avances fueron más abultados en el caso de Fráncfort (0,27 por ciento) y Londres (0,32 por ciento) y más discretos en el de París (0,15 por ciento) y Milán (0,02 por ciento).
Los mercados del Viejo Continente comenzaron la última sesión de la semana con avances, apoyados en el imparable ascenso del Nikkei, que se encuentra en máximos de siete años y vive ajeno a los factores que presionan a la baja a los mercados de renta variable, como la subida de tipos o el encarecimiento del petróleo. En Europa destacó la inesperada caída de la confianza empresarial en febrero en Alemania, que consiguió dar la vuelta a las bolsas.
El Instituto de Investigación Económica alemán (Ifo) informó de que el índice de confianza empresarial en el conjunto de Alemania bajó en febrero hasta los 107 puntos -frente a los 107,9 puntos de enero y los 107,6 esperados por el mercado- debido a las malas perspectivas para las exportaciones y el sector manufacturero..
Como telón de fondo, la subida del precio del barril de crudo, que tanto en el caso del brent, de referencia en Europa, como en el del texas, de referencia en Estados Unidos, cotiza por encima de los 61 dólares, lo que no ocurría desde finales de 2006, ante la negativa de Irán a cesar el enriqueciendo uranio y los conflictos sociales en Nigeria, que limitan la producción petrolera del país.
Ante este panorama, las bolsas de Nueva York abrieron con tendencia a la baja, afectadas también por el fallo judicial que obliga a Microsoft a pagar 1.500 millones de dólares a Alcatel-Lucent por violación de patentes. En España, las caídas más perjudiciales para el mercado fueron las de Santander, que se dejó el 0,41, por ciento; BBVA, que perdió el 0,26 por ciento, e Iberdrola, que cayó el 0,63 por ciento.
Telefónica, que llegó a perder cerca del 0,8 por ciento, acabó en tablas y suavizó la caída del mercado, que estuvo a punto de perder la cota de los 14.700. Por su parte, Endesa subió el 0,18 por ciento y Repsol avanzó el 0,52 por ciento impulsada por el repunte del petróleo. El mayor retroceso del Ibex-35 correspondió a Metrovacesa, que cayó el 5,05 por ciento y acumula una bajada del 13,8 por ciento desde que sus accionistas principales comunicaron su decisión de dividir en dos a la principal inmobiliaria española.
Por detrás se situaron Gamesa, que cedió el 2,17 por ciento, e Iberia, que cayó el 2,06 por ciento después de la espectacular subida que experimentó el jueves envuelta en "desmentidos" rumores de unión con Lufthansa. Los mayores avances del selectivo correspondieron a REE, que ganó el 3,48 por ciento; Ferrovial, que subió el 1,54 por ciento, y Telecinco, que ascendió el 1,42 por ciento. En el mercado continuo, los valores que peor se comportaron fueron Testa Inmobiliaria e Indo, que se dejaron el 9,66 y el 4,67 por ciento, respectivamente.
La cotizada que más se revalorizó fue Jazztel, que avanzó el 5,63 por ciento; seguida de CVNE (4,04 por ciento), REE, Montebalito (3,46 por ciento) y BME, que repuntó el 3,01 por ciento y cerró con un nuevo precio máximo de 38 euros envuelta de nuevo en las especulaciones que la vinculan a la Deutsche Börse. En el mercado secundario de deuda, la rentabilidad del bono español a diez años cayó cuatro centésimas y se situó en el 4,06 por ciento.
Como telón de fondo, la subida del precio del barril de crudo, que tanto en el caso del brent, de referencia en Europa, como en el del texas, de referencia en Estados Unidos, cotiza por encima de los 61 dólares, lo que no ocurría desde finales de 2006, ante la negativa de Irán a cesar el enriqueciendo uranio y los conflictos sociales en Nigeria, que limitan la producción petrolera del país.
Ante este panorama, las bolsas de Nueva York abrieron con tendencia a la baja, afectadas también por el fallo judicial que obliga a Microsoft a pagar 1.500 millones de dólares a Alcatel-Lucent por violación de patentes. En España, las caídas más perjudiciales para el mercado fueron las de Santander, que se dejó el 0,41, por ciento; BBVA, que perdió el 0,26 por ciento, e Iberdrola, que cayó el 0,63 por ciento.
Telefónica, que llegó a perder cerca del 0,8 por ciento, acabó en tablas y suavizó la caída del mercado, que estuvo a punto de perder la cota de los 14.700. Por su parte, Endesa subió el 0,18 por ciento y Repsol avanzó el 0,52 por ciento impulsada por el repunte del petróleo. El mayor retroceso del Ibex-35 correspondió a Metrovacesa, que cayó el 5,05 por ciento y acumula una bajada del 13,8 por ciento desde que sus accionistas principales comunicaron su decisión de dividir en dos a la principal inmobiliaria española.
Por detrás se situaron Gamesa, que cedió el 2,17 por ciento, e Iberia, que cayó el 2,06 por ciento después de la espectacular subida que experimentó el jueves envuelta en "desmentidos" rumores de unión con Lufthansa. Los mayores avances del selectivo correspondieron a REE, que ganó el 3,48 por ciento; Ferrovial, que subió el 1,54 por ciento, y Telecinco, que ascendió el 1,42 por ciento. En el mercado continuo, los valores que peor se comportaron fueron Testa Inmobiliaria e Indo, que se dejaron el 9,66 y el 4,67 por ciento, respectivamente.
La cotizada que más se revalorizó fue Jazztel, que avanzó el 5,63 por ciento; seguida de CVNE (4,04 por ciento), REE, Montebalito (3,46 por ciento) y BME, que repuntó el 3,01 por ciento y cerró con un nuevo precio máximo de 38 euros envuelta de nuevo en las especulaciones que la vinculan a la Deutsche Börse. En el mercado secundario de deuda, la rentabilidad del bono español a diez años cayó cuatro centésimas y se situó en el 4,06 por ciento.