Así consta en el primer informe sobre el estado de la economía mundial que publica BBVA Research, donde incluye sus últimas previsiones macroeconómicas a nivel mundial actualizadas el pasado 30 de abril. Si se incluye el recorte del gasto planteado por el Gobierno (de 5.000 este año), entonces el déficit cerraría el ejercicio en el 9,9% del PIB, en lugar del 10,4% previsto por BBVA, es decir, un agujero de 99.000 millones de euros.
De cara al 2011 el desfase de las previsiones supera el punto, ya que el Gobierno espera reducir el déficit al 7,5%, mientras que la entidad financiera cree que cerrará el año en el 8,7%. Todo ello sin el plan de ajuste, ya que con las nuevas medidas de ahorro (10.000 millones en 2011), el Gobierno espera que la brecha entre gastos e ingresos sea del 6% del PIB.
Las previsiones para la economía española son más pesimistas que las del Gobierno, que prevé una caída del PIB del 0,3% este año y un crecimiento del 1,8% en 2011. Sin embargo, el propio presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ya ha admitido que las últimas medidas anunciadas para reducir el déficit corregirán a la baja la previsión de 2011.
De hecho, la vicepresidenta económica, Elena Salgado, ha explicado que, en unos días, el Gobierno revisará "unas décimas" a la baja esta cifra (1,8%), aunque previsiblemente no se modificará la de 2010.
La semana pasada, el secretario de Estado de Economía, José Manuel Campa, ya dijo que el Gobierno está revisando todo el cuadro macro tras el anuncio de las nuevas medidas, que también podrían afectar a las cifras de empleo.
La economía mundial, por su parte, logrará crecer un 4,2% en 2010 gracias al impulso de EE.UU. y los países emergentes, y reducirá su crecimiento al 4,1% en 2011.