L D (EFE) El consumo mantuvo la fortaleza de trimestres anteriores, a lo que se unió el buen comportamiento de la inversión durante el segundo trimestre del año, aseguran las Cámaras.
Durante el segundo trimestre la producción de bienes de capital aceleró su tasa de crecimiento, lo que acabó por compensar, según las Cámaras, la pérdida de dinamismo que registrada en la inversión en construcción.
Lo que no repuntó de forma clara fueron las inversiones, debido a que la "débil economía" de los principales países europeos continúa frenando las ventas españolas en el exterior y a pesar de que su tasa de crecimiento ha sido más intensa que en el trimestre anterior.
Durante el segundo trimestre la producción de bienes de capital aceleró su tasa de crecimiento, lo que acabó por compensar, según las Cámaras, la pérdida de dinamismo que registrada en la inversión en construcción.
Lo que no repuntó de forma clara fueron las inversiones, debido a que la "débil economía" de los principales países europeos continúa frenando las ventas españolas en el exterior y a pesar de que su tasa de crecimiento ha sido más intensa que en el trimestre anterior.
Las estimaciones de las Cámaras apuntan a una recuperación de la actividad industrial, a una ligera desaceleración del ritmo de avance de la construcción y a una estabilización de la progresión interanual del sector servicios superior al tres por ciento.
Moderación
Para el tercer trimestre del año, las Cámaras prevén una ligera moderación en el ritmo de crecimiento económico por la evolución más templada del consumo, lo que podría restar una décima al incremento del PIB (2,7 por ciento). Paralelamente, estiman necesaria una recuperación más intensa de las exportaciones para que la industria siga manteniendo su ritmo de avance.
En cuanto a la zona euro, destacan que se recupera más lentamente que el resto de las economías mundiales, ya que en el primer trimestre fue del 1,3 por ciento. Asimismo, pronostican que para el segundo semestre el crecimiento se apoyará en las exportaciones, la inversión y el consumo, mientras que el empleo no se sumará a la recuperación.
En cuanto a la zona euro, destacan que se recupera más lentamente que el resto de las economías mundiales, ya que en el primer trimestre fue del 1,3 por ciento. Asimismo, pronostican que para el segundo semestre el crecimiento se apoyará en las exportaciones, la inversión y el consumo, mientras que el empleo no se sumará a la recuperación.
Francia y España, a la cabeza
Según las Cámaras, las diferencias entre los países europeos siguen siendo muy significativas. Mientras Francia y España muestran una clara aceleración e importantes tasas de actividad, Alemania e Italia siguen en las últimas posiciones. Por ello, consideran que el Banco Central Europeo (BCE) debe esperar, antes de subir los tipos de interés, a que la mejoría del PIB se consolide y a que el empleo muestre mayor fortaleza en la Unión Europea (UE).
El BCE debería retrasar su decisión y ver cuál es la evolución de la inflación en los próximos meses, puesto que el repunte de los precios energéticos es, en principio, temporal, indican las Cámaras.
De la economía mundial, resaltan que crece a un ritmo superior al 4,5 por ciento y que sus motores son Estados Unidos, China y los países miembros de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN).
A pesar de que la recuperación está bien asentada, existen ciertos peligros que podrían moderar el crecimiento para 2005, entre los que las Cámaras citan los elevados precios del crudo.