No obstante, la cifra de negocios de la industria moderó su crecimiento y volvió a situarse por debajo de los dos dígitos en abril hasta el 6,2%, más de seis puntos por debajo de la registrada en marzo, después de crecer un 0,6% en enero y un 7,2% en febrero.
En los últimos meses de 2009 la industria ya había empezado a dar síntomas de recuperación. Así, frente a las caídas interanuales récord de más del 30% experimentadas en los primeros meses del año pasado, la facturación del sector moderó su contracción en la última parte del año, hasta situarse por debajo de los dos dígitos.
En diciembre pasado, la cifra de negocios de la industria se contrajo un 2,9%, cifra que, pese a representar su décimoquinta caída interanual consecutiva, supuso su menor descenso en más de un año. Con la llegada de 2010, la industria recuperó el tono positivo, no sólo en la facturación, también en lo concerniente a los pedidos.
En concreto, las entradas de pedidos del sector subieron un 4,3% en abril, más de nueve puntos por debajo de la observada en marzo. Se trata del quinto incremento interanual consecutivo que registran los pedidos industriales tras los de diciembre (+3,9%), enero (+2%) y febrero (+7,7%) y marzo (+13,6%).
En los cuatro primeros meses del año, la facturación de la industria creció un 6,8% de media, en tanto que las entradas de pedidos repuntaron un 6,9%.
Bienes intermedios y energía
La cifra de negocios de la industria se vio impulsada en abril por los bienes intermedios, que situaron su tasa anual en el 11,4%, gracias al incremento de la facturación en casi todas las actividades, especialmente en metalurgia (+45%) e industria química (+22,9%). La facturación de la industria también se vio favorecida por la energía, que experimentó un repunte del 31% debido al aumento de coquerías y refino de petróleo.
Los pedidos siguen creciendo
Por su parte, las entradas de pedidos del sector subieron un 4,3% en abril, más de nueve puntos por debajo de la registrado en marzo. Los bienes intermedios y la energía fueron los que más contribuyeron al crecimiento positivo de los pedidos en abril. Los primeros experimentaron una tasa anual del 11,8%, motivada por el aumento de nuevos pedidos en la metalurgia (+41%). En el caso de la energía, los pedidos repuntaron un 31% por el incremento experimentado en las coquerías y refino de petróleo (+33,2%).