L D (Agencias) El acuerdo, cerrado este lunes por el presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, y el ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, sobre la liquidación del anterior sistema de financiación autonómica se rubricará el próximo 10 de junio.
A pesar de que hace 12 días el secretario de Estado de Hacienda, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, cifró la liquidación de la deuda (correspondiente al periodo 1997-2001) en 2.330 millones de euros, el pacto definitivo ha elevado la cifra hasta los 2.500,034 millones, y ha incluido el traspaso de 12 competencias. En virtud del acuerdo alcanzado, la Junta se compromete a retirar los recursos presentados ante el Tribunal Constitucional.
Orígenes de la deuda
El conflicto se desencadenó cuando el Gobierno andaluz rechazó el modelo de financiación autonómica aprobado en diciembre de 1996, que se basaba en la cesión del 30 por ciento del IRPF a las CCAA. El citado modelo contó con el visto bueno, en el Consejo de Política Fiscal y Financiera, de todos los Ejecutivos autonómicos, salvo los de Andalucía, Castilla-La Mancha y Extremadura, entonces y ahora en manos socialistas.
Las tres regiones argumentaban que en la negociación con el Gobierno no se había contemplado el censo de 1996, sino el padrón de 1988, lo que suponía restar 365.000 personas en el caso de Andalucía, según la Junta. Esta merma de habitantes se traducía en que las regiones afectadas percibirían una cantidad menor de la que les correspondía.
En 2001 Andalucía se sumó al siguiente sistema de financiación, pero mantuvo su reclamación sobre el quinquenio perdido. Lo mismo ocurrió con Extremadura y con Castilla-La Mancha, que ya han alcanzado acuerdos con el Gobierno central para saldar la deuda.