LD (EFE) El Comité de Mercado Abierto de la Reserva, al término de la reunión, indicó en un comunicado que sigue vigilante ante los riesgos de presiones inflacionarias y que aplicará los ajustes de la política monetaria que crea necesarios para controlar los aumentos de precios sin asfixiar el crecimiento económico.
"La moderación del crecimiento económico parece continuar y refleja, en parte, un enfriamiento del mercado de la vivienda", señaló el comunicado. Sin embargo, la decisión del Comité no fue unánime. Uno de los 12 miembros, Jeffrey Lacker, votó contra el mantenimiento de la misma política e indicó su preferencia por un ajuste que hubiese incrementado las tasas de interés en otro cuarto de punto porcentual.
La tasa de interés interbancario de corto plazo, que en junio de 2004 estaba en el 1 por ciento, el nivel más bajo desde 1958, está ahora estancada en el 5,25 por ciento, tras 17 ajustes consecutivos hasta el 8 de agosto pasado. La decisión de mantener esta pausa no sorprendió a los mercados, y los analistas estaban de acuerdo en que la Fed dejaría pasar más tiempo para evaluar el curso probable de la economía.
Según los gobernadores del banco central estadounidense, "las presiones de inflación probablemente se moderarán con el tiempo, como resultado de un impacto reducido de los precios de la energía, menores expectativas de inflación y los efectos acumulativos de las acciones de política monetaria y otros factores que restringen la demanda agregada". En otras palabras, la Reserva cree que los consumidores, que han sentido en los últimos dos años el impacto doble del aumento de las tasas de interés y de los precios de la gasolina, moderarán su gasto, moderando así la inflación.
"La moderación del crecimiento económico parece continuar y refleja, en parte, un enfriamiento del mercado de la vivienda", señaló el comunicado. Sin embargo, la decisión del Comité no fue unánime. Uno de los 12 miembros, Jeffrey Lacker, votó contra el mantenimiento de la misma política e indicó su preferencia por un ajuste que hubiese incrementado las tasas de interés en otro cuarto de punto porcentual.
La tasa de interés interbancario de corto plazo, que en junio de 2004 estaba en el 1 por ciento, el nivel más bajo desde 1958, está ahora estancada en el 5,25 por ciento, tras 17 ajustes consecutivos hasta el 8 de agosto pasado. La decisión de mantener esta pausa no sorprendió a los mercados, y los analistas estaban de acuerdo en que la Fed dejaría pasar más tiempo para evaluar el curso probable de la economía.
Según los gobernadores del banco central estadounidense, "las presiones de inflación probablemente se moderarán con el tiempo, como resultado de un impacto reducido de los precios de la energía, menores expectativas de inflación y los efectos acumulativos de las acciones de política monetaria y otros factores que restringen la demanda agregada". En otras palabras, la Reserva cree que los consumidores, que han sentido en los últimos dos años el impacto doble del aumento de las tasas de interés y de los precios de la gasolina, moderarán su gasto, moderando así la inflación.
Aún así, los analistas opinan que este contexto es uno de los más difíciles para hacer pronósticos en muchos años. Por un lado, algunos creen que la desaceleración en el sector de la vivienda atenuará el gasto de los consumidores. Pero otros, creen que los consumidores son empecinados, y esperan que el crecimiento recupere su ritmo hacia fin de año, especialmente si siguen bajando los precios de la energía.