LD (Agencias) Granado ha explicado durante su comparecencia ante la Comisión de Trabajo y Asuntos Sociales del Senado que este superávit permitirá aprobar dotaciones para el Fondo de Reserva "muy superiores a las de años anteriores".
Según Granado, este excedente se debe al buen resultado de las mutuas, al crecimiento económico, a la creación de empleo, la incorporación de las mujeres al mercado laboral, los ingresos generados por los inmigrantes y a la reducción del gasto en prestaciones por la llamada "tregua demográfica" (hay menos jubilados porque las personas de esta edad nacieron en la posguerra, los años de menor natalidad).
Sin embargo, advirtió el secretario de Estado advirtió de que, en el futuro, se producirá un envejecimiento de la población y aumentará la esperanza de vida, al tiempo que los flujos migratorios y la incorporación de las mujeres al mercado laboral se ralentizarán. Por eso, Granado reconoció que "este conjunto de elementos hacen necesarias reformas, que ya se han comenzado a discutir en el diálogo social y que también deben ser consensuadas por los grupos parlamentarios, siempre con el espíritu del Pacto de Toledo", subrayó.
Sin embargo, según dijo, estas reformas, no implicarán un recorte de prestaciones, sino una "mejor ordenación del gasto y de la distribución de las cargas y beneficios del sistema", con el propósito de acabar con las situaciones de sobreprotección", explicó. En cuanto a la prolongación de la vida laboral, anunció que el Gobierno quiere proponer a los interlocutores "la profundización de las medidas que se pusieron en marcha en el acuerdo de 2001". Según informó Granado, la intención del Gobierno es crear "nuevos y mayores incentivos para los trabajadores que decidan jubilarse más tarde" y que, por ello, obtengan beneficios económicos.
Según Granado, este excedente se debe al buen resultado de las mutuas, al crecimiento económico, a la creación de empleo, la incorporación de las mujeres al mercado laboral, los ingresos generados por los inmigrantes y a la reducción del gasto en prestaciones por la llamada "tregua demográfica" (hay menos jubilados porque las personas de esta edad nacieron en la posguerra, los años de menor natalidad).
Sin embargo, advirtió el secretario de Estado advirtió de que, en el futuro, se producirá un envejecimiento de la población y aumentará la esperanza de vida, al tiempo que los flujos migratorios y la incorporación de las mujeres al mercado laboral se ralentizarán. Por eso, Granado reconoció que "este conjunto de elementos hacen necesarias reformas, que ya se han comenzado a discutir en el diálogo social y que también deben ser consensuadas por los grupos parlamentarios, siempre con el espíritu del Pacto de Toledo", subrayó.
Sin embargo, según dijo, estas reformas, no implicarán un recorte de prestaciones, sino una "mejor ordenación del gasto y de la distribución de las cargas y beneficios del sistema", con el propósito de acabar con las situaciones de sobreprotección", explicó. En cuanto a la prolongación de la vida laboral, anunció que el Gobierno quiere proponer a los interlocutores "la profundización de las medidas que se pusieron en marcha en el acuerdo de 2001". Según informó Granado, la intención del Gobierno es crear "nuevos y mayores incentivos para los trabajadores que decidan jubilarse más tarde" y que, por ello, obtengan beneficios económicos.