"La primera pasa por crear dos grandes entidades, y luego otra, con instrumentos financieros y capacidad suficiente para competir, y sobrevivir, en el nuevo panorama financiero tras la crisis", explica Pepe Contreras en El Economista, que también le dedica el editorial a este asunto.
Y añade: "El plan de Chaves, del PSOE, es contar en el sur con dos megacajas y situar al frente a dos hombres de su máxima confianza: Antonio Pulido y Braulio Medel. Ante una eventual victoria del PP en Andalucía y Castilla La Mancha, el PSOE mantendría el control financiero."
Y continúa de este modo: "En el plazo de cinco años se ha pasado de seis cajas de ahorro a tres. El plan lleva la rúbrica de Manuel Chaves y José Luis Rodríguez Zapatero. De hecho, Chaves se alegró ayer por el "buen camino" iniciado por Andalucía para tener "una gran caja". Al mismo tiempo, el Gobierno andaluz dijo que está "abierto" a modificar la Ley de Cajas si es necesario para "facilitar" la fusión entre Unicaja, Caja de Jaén y Caja Sur.
De consumarse la fusión entre Unicaja, la Caja de Jaén y Cajasur, quedaría aislada Caja Granada, cuyo presidente, el socialista Antonio María Claret, está indeciso aún. La fusión entre Unicaja, Caja de Jaén y Cajasur sería la primera que se produce tras aprobarse el Fondo de Reestructuración y Ordenación Bancaria (FROB), por el que se podrían recabar ayudas para este tipo de operaciones.
Mientras, el vicepresidente de Unicaja, Manuel Atencia (PP), consideró "imprescindible" y "necesario" que exista un acuerdo entre partidos a la hora de abordar los posibles cambios en la Ley de Cajas, a raíz de esta operación. Atencia instó a la Junta a "pactar con el PP, primer partido de la oposición" los cambios que sean necesarios acometer en la normativa. "Será necesario el consenso en todos sus ámbitos, será algo imprescindible", añadió. Sin embargo, el PSOE parece querer, según El Economista, un poder financiero en manos del PSOE al margen del PP o con escasa influencia de este.
"Cajasol es líder en las provincias occidentales de Andalucía, Sevilla, Cádiz y Huelva, gracias a la reciente fusión de El Monte y San Fernando, ya culminada. La entidad andaluza tiene toda la maquinaria en marcha y Pulido despliega habilidades, trabajando en silencio, para crear la segunda megacaja, donde aportaría la mayor parte a esa fusión (con activos por 29.406 millones, 1.000 oficinas y 5.000 empleados), frente a la Caja de Extremadura (7.253 millones, 245 oficinas y 1.150 empleados) y Caja de Badajoz (3.896 millones, 220 oficinas y 950 empleados).
Pulido tiene en el punto de mira dos piezas más, Caja Guadalajara y, pendiente de su saneamiento financiero, Caja Castilla-La Mancha. Sumando estas dos, se superaría ampliamente los 50.000 millones de euros en recursos que recomienda el Banco de España. Caja Guadalajara confirmó que su presidente, José Luis Ros, se reunió en Zafra (Badajoz) con el presidente de Cajasol, un encuentro informal donde, según dice, "se habló de muchas cosas".
Para El Economista, "la Junta de Andalucía ha empezado a moverse para crear dos grandes cajas de ahorros con el fin de controlar el sur financiero. La primera ya se ha concretado: Unicaja acaba de cerrar el principio de acuerdo de fusión con CajaSur para crear la sexta caja de ahorros española, una operación en la que participa Caja Jaén. La otra gran alianza se está preparando desde Cajasol, que explora fusiones con las cajas extremeñas, con Caja Guadalajara y gran parte de los activos de Caja Castilla-La Mancha. La estrategia auspiciada desde la Junta de Andalucía tiene dos lecturas. La primera es positiva, porque por fin se ha iniciado la reestructuración del sector financiero, sobre todo en las cajas de ahorros, que son en general las que están saliendo peor paradas y las más difíciles de gestionar debido a su exposición a las injerencias políticas.
Además, se hace en un ámbito interregional, un obstáculo que era difícil de superar, pero que tiene más sentido porque las diversifica. Les permite ganar sinergias fruto de la concentración y hacerse más fuertes. Y reducirá la oferta, algo que necesita este sector sobredimensionado. También está bien planteado que las nuevas entidades se originen entorno a Unicaja y Cajasol, dada su actual salud financiera. La otra lectura no tan positiva es precisamente la intervención política. Que se trate de una operación diseñada por el Gobierno regional andaluz, muy probablemente con la idea de no perder cuota de poder, difumina la garantía de que rijan criterios técnicos y financieros. Sería bueno que se aprovechara la reestructuración para despolitizar y profesionalizar la gestión de estas entidades."