Las provisiones realizadas por las cajas en los nueve primeros meses del año alcanzaron 6.292 millones de euros, de los que las dotaciones netas a provisiones alcanzaron los 113 millones, las pérdidas por deterioro de activos financieros, 5.324 millones, y las pérdidas por deterioro de otros activos, 855 millones. Las dotaciones netas a provisiones y las pérdidas netas por deterioro de activos se redujeron 32% y un 27,7%, respectivamente.
El resultado agregado alcanzó 3.694 millones, un 28,1% menos, mientras que el resultado antes de impuestos fue de 3.878 millones de euros, un 34,9 por ciento menos que en el mismo periodo de 2009.