(LD) Según informa el diario Expansión, la compañía aérea cuenta con un programa de seguros en el que participan varias entidades. Aon Londres, presente en España a través de Aon Gil y Carvajal, es el bróker que intermedió el diseño y contratación de la cobertura con las aseguradores. En caso de siniestro, estos mediadores, junto con los abogados, suelen realizar también tareas de asesoramiento en la tramitación de las reclamaciones.
Mapfre forma parte del programa de seguros de Spanair como entidad local que realiza lo que en el sector se denomina fronting. Con esta fórmula, el papel de Mapfre o de cualquier otra entidad que realice estas funciones, se asemeja mucho al de un intermediario, ya que en realidad prácticamente no asume riesgo y se limita a ceder esta cobertura, generalmente, a otras entidades reaseguradoras, que son las que afrontarán las indemnizaciones.
Mapfre afirmó ayer que el riesgo económico del siniestro no tiene ningún efecto para ella y subrayó que los afectados deben dirigirse a Spanair para informarse de los trámites a seguir en el cobro de las indemnizaciones.
El mercado de seguros de Londres es el mayor receptor de grandes riesgos en Europa y, según fuentes del mercado, es donde está suscrita la póliza de Spanair, aunque repartida entre varias entidades, una práctica habitual que busca distribuir las posibles cargas para evitar un desembolso que desestabilice a las firmas. Según fuentes del mercado, ACE Europe participaría al menos en parte del seguro.
En el caso de que se confirme que en el vuelo había pasajeros que habían comprado su billete a Lufthansa, lo más probable es que los familiares tengan que reclamar sus indemnizaciones a la aerolínea alemana, y no a Spanair, según afirma Luis Souto, del bufete Albors Galiano. En cualquier caso, dependerá del tipo de contrato que se firmara entre ambas compañías para operar conjuntamente.
Dos coberturas
Mapfre forma parte del programa de seguros de Spanair como entidad local que realiza lo que en el sector se denomina fronting. Con esta fórmula, el papel de Mapfre o de cualquier otra entidad que realice estas funciones, se asemeja mucho al de un intermediario, ya que en realidad prácticamente no asume riesgo y se limita a ceder esta cobertura, generalmente, a otras entidades reaseguradoras, que son las que afrontarán las indemnizaciones.
Mapfre afirmó ayer que el riesgo económico del siniestro no tiene ningún efecto para ella y subrayó que los afectados deben dirigirse a Spanair para informarse de los trámites a seguir en el cobro de las indemnizaciones.
El mercado de seguros de Londres es el mayor receptor de grandes riesgos en Europa y, según fuentes del mercado, es donde está suscrita la póliza de Spanair, aunque repartida entre varias entidades, una práctica habitual que busca distribuir las posibles cargas para evitar un desembolso que desestabilice a las firmas. Según fuentes del mercado, ACE Europe participaría al menos en parte del seguro.
En el caso de que se confirme que en el vuelo había pasajeros que habían comprado su billete a Lufthansa, lo más probable es que los familiares tengan que reclamar sus indemnizaciones a la aerolínea alemana, y no a Spanair, según afirma Luis Souto, del bufete Albors Galiano. En cualquier caso, dependerá del tipo de contrato que se firmara entre ambas compañías para operar conjuntamente.
Dos coberturas
El seguro de aviación tiene dos coberturas, la denominada de "cascos" que cubre los daños del aparato y la de responsabilidad civil que garantiza las indemnizaciones que puedan ser exigibles por las víctimas o sus familiares a la compañía aérea. Rodolfo González Lebrero, de la firma de abogados Lebrero Galván, afirma que la Ley de Navegación Aérea fija las indemnizaciones a las víctimas de accidentes de aviación y las cuantifica mediante lo que se denomina derechos especiales de giro (DEG), una cesta de monedas con un valor de entorno a 1,28-1,30 euros.
Los pagos estipulados son de 100.000 DEG (unos 130.000 euros) por fallecimiento o incapacidad total permanente. Si el accidente de Spanair se salda con un total de 153 víctimas mortales, esto supondría un pago total por este concepto de 20 millones de euros a los familiares de las víctimas.
Aunque lo más probable es que Spanair llegue rápido a un acuerdo amistoso con los afectados, con cantidades superiores a las que la ley establece como obligatorias. De este modo, las aseguradoras pagarían el tramo obligatorio, cubierto por la póliza, y la compañía aérea debería asumir el resto.
Además, los viajeros que pagaron el billete con tarjeta cuentan con un seguro adicional. Los familiares de los fallecidos pueden acudir al registro de seguros de vida para conocer si contaban con esta cobertura en alguna entidad.
Cómo tendrán que reclamar los afectados
¿A quién tendrán que reclamar los familiares de las víctimas y los heridos?
Los que hubiesen comprado un billete de Spanair, tendrán que reclamar a esta compañía. Los que hubiesen contratado con Lufthansa, tendrán que reclamar a la alemana, aunque depende del contrato firmado por ambas aerolíneas.
¿Cuándo podrán recibir las indemnizaciones?
En el plazo de 15 días desde la identificación del cadáver las aerolíneas están obligadas a desembolsar un anticipo de alrededor de 21.000 euros. Para recibir el total, habrá que esperar a un acuerdo amistoso o una sentencia que declare la responsabilidad.
¿Qué montante tendrán las indemnizaciones?
Hay un máximo por fallecido por responsabilidad objetiva, es decir, cualquiera que fuese la causa del accidente. Sin embargo, los perjudicados pueden reclamar fuera de esos límites, pero las compañías responden sólo en caso de negligencia.
¿Quién se hará cargo finalmente?
Las múltiples aseguradoras deberán asumir las cantidades que la ley establece como obligatorias. Las aerolíneas cubrirán el resto, si es que, por acuerdo amistoso o por sentencia, se establece que deben pagar algo más.