LD (Agencias) El presidente del Consejo de Administración del grupo, René Carron, dio cuenta de un beneficio neto de "968 millones de euros" y de "un impacto negativo" de la crisis financiera internacional "de 1.339 millones".
Estas cifras muestran por qué Crédit Agricole es el banco francés más afectado por la crisis de los mercados de crédito, que ya ha hecho acumular pérdidas al banco por valor de 6.500 millones de euros.
Parte de la responsabilidad de estas pérdidas recae en las cifras de Calyon, el banco de financiación e inversión del grupo, que acusa unas pérdidas de 3.550 millones de euros en los tres últimos trimestres. En el segundo trimestre de 2008, Calyon perdió 855 millones de euros.
Según informó el director general de Crédit Agricole, Georges Pauget, el grupo lanzará un "plan de transformación y desarrollo" de Calyon "el próximo 10 de septiembre" habida cuenta del "impacto de la crisis financiera" sobre el banco de financiación e inversión.
El impacto "continúa notándose", reconoció Pauget, por lo que "hemos iniciado, como habíamos anunciado, un esfuerzo significativo en el control de los costes y en el reajuste".
Por su parte, Carron recordó que los "fundamentos del grupo bancario son sólidos". En la actualidad, dijo, Crédit Agricole, "conoce una dinámica comercial real en Francia" y en el ámbito internacional. Según él, los "260.000 clientes de más" con los que cuenta el banco muestran "perfectamente la solidez del grupo".