LD (EFE) En febrero pasado el mercado electrónico neoyorquino dio por terminado su ataque al LSE tras ser rechazada por la mayoría de los accionistas del parqué londinense su segunda oferta hostil por 2.700 millones de libras (unos 5.400 millones de dólares). Debido a que el Nasdaq ya había lanzado un primer intento por hacerse con el control de la LSE a principios del año pasado, al final acumuló cerca de un 30 por ciento de las acciones de este mercado, pese a lo cual no logró el control.
En virtud del acuerdo anunciado hoy, OMX recibirá 0,502 acciones de las nueva compañía, que se llamará Nasdaq OMX, más 94,3 coronas suecas (10,25 euros) en efectivo por cada uno de sus títulos. Esto equivale a un sobreprecio del 16 por ciento respecto del cierre de ayer de las acciones de OMX, compañía que desde al menos marzo pasado estaba en conversaciones con posibles compradores, lo que había hecho subir el valor de sus acciones un 43 por ciento en el 2007.
Se calcula que el Nasdaq pagará cerca de 7,6 veces los ingresos de OMX, comparado con cerca de las 10 veces que pagó el NYSE, la mayor bolsa del mundo, por su rival europeo Euronext, como parte de su operación de compra por 14.000 millones de dólares. Para los analistas la compra de OMX no es tan buena como lo hubiese sido la del LSE, bolsa con la que el Nasdaq comparte una serie de procesos que hubiesen hecho la integración menos compleja. Sin embargo, concuerdan que la compra de OMX no sólo fue acordada a un precio conveniente para el Nasdaq, sino que es también un muy buen primer pie en el mercado europeo.
La fusión de Nasdaq y OMX creará el mayor mercado de valores del mundo relacionado con la innovación y la tecnología, según un comunicado de las compañías, y la capitalización de las empresas que negociarán en ella se elevará hasta los 5,5 billones de dólares. Entre las firmas que pasarán a integrar el nuevo mercado figuran gigantes estadounidenses como Microsoft e Intel, el fabricante finlandés de teléfonos celulares Nokia y el segundo mayor fabricante de camiones del mundo, la sueca Volvo.
La nueva compañía tendrá 2.349 empleados en 22 países y unos ingresos estimados en unos 1.600 millones de euros anuales (unos 1.200 millones de dólares). La dirección de Nasdaq OMX estará a cargo de Robert Greifeld, actual consejero delegado del Nasdaq, y Magnus Boecker, consejero delegado de OMX, será el presidente del consejo de administración. Este consejo estará integrado por nueve directores del Nasdaq y cinco de OMX, a los que se suma el consejero delegado.
OMX, fundada en 1985, se compone de dos divisiones: OMX Exchange, dueña de las bolsas de Copenhague, Estocolmo, Helsinki, Tallin, Riga y Vilnius, y OMX Technology, que proporciona soluciones y servicios. El año pasado la compañía mercado creó una lista conjunta de valores nórdicos, que incluye las bolsas de Estocolmo, Helsinki, Copenhague y Reikiavik.
Se espera que la fusión esté finalizada en el cuarto trimestre y que se generen ahorros operacionales del orden de los 100 millones de dólares anuales a partir del 2010 y que OMX haga crecer en cerca de 50 millones de dólares anuales los ingresos del Nasdaq. Poco después de la media sesión de hoy, las acciones del Nasdaq anotaban una bajada del 3,68 por ciento a 32,73 dólares, mientras las de OMX subieron en la bolsa de Estocolmo un 11 por ciento a 200 coronas.
En virtud del acuerdo anunciado hoy, OMX recibirá 0,502 acciones de las nueva compañía, que se llamará Nasdaq OMX, más 94,3 coronas suecas (10,25 euros) en efectivo por cada uno de sus títulos. Esto equivale a un sobreprecio del 16 por ciento respecto del cierre de ayer de las acciones de OMX, compañía que desde al menos marzo pasado estaba en conversaciones con posibles compradores, lo que había hecho subir el valor de sus acciones un 43 por ciento en el 2007.
Se calcula que el Nasdaq pagará cerca de 7,6 veces los ingresos de OMX, comparado con cerca de las 10 veces que pagó el NYSE, la mayor bolsa del mundo, por su rival europeo Euronext, como parte de su operación de compra por 14.000 millones de dólares. Para los analistas la compra de OMX no es tan buena como lo hubiese sido la del LSE, bolsa con la que el Nasdaq comparte una serie de procesos que hubiesen hecho la integración menos compleja. Sin embargo, concuerdan que la compra de OMX no sólo fue acordada a un precio conveniente para el Nasdaq, sino que es también un muy buen primer pie en el mercado europeo.
La fusión de Nasdaq y OMX creará el mayor mercado de valores del mundo relacionado con la innovación y la tecnología, según un comunicado de las compañías, y la capitalización de las empresas que negociarán en ella se elevará hasta los 5,5 billones de dólares. Entre las firmas que pasarán a integrar el nuevo mercado figuran gigantes estadounidenses como Microsoft e Intel, el fabricante finlandés de teléfonos celulares Nokia y el segundo mayor fabricante de camiones del mundo, la sueca Volvo.
La nueva compañía tendrá 2.349 empleados en 22 países y unos ingresos estimados en unos 1.600 millones de euros anuales (unos 1.200 millones de dólares). La dirección de Nasdaq OMX estará a cargo de Robert Greifeld, actual consejero delegado del Nasdaq, y Magnus Boecker, consejero delegado de OMX, será el presidente del consejo de administración. Este consejo estará integrado por nueve directores del Nasdaq y cinco de OMX, a los que se suma el consejero delegado.
OMX, fundada en 1985, se compone de dos divisiones: OMX Exchange, dueña de las bolsas de Copenhague, Estocolmo, Helsinki, Tallin, Riga y Vilnius, y OMX Technology, que proporciona soluciones y servicios. El año pasado la compañía mercado creó una lista conjunta de valores nórdicos, que incluye las bolsas de Estocolmo, Helsinki, Copenhague y Reikiavik.
Se espera que la fusión esté finalizada en el cuarto trimestre y que se generen ahorros operacionales del orden de los 100 millones de dólares anuales a partir del 2010 y que OMX haga crecer en cerca de 50 millones de dólares anuales los ingresos del Nasdaq. Poco después de la media sesión de hoy, las acciones del Nasdaq anotaban una bajada del 3,68 por ciento a 32,73 dólares, mientras las de OMX subieron en la bolsa de Estocolmo un 11 por ciento a 200 coronas.