Sacyr espera reducir su deuda corporativa a 0 en 2010

Del Rivero explicó en una rueda de prensa anterior a la Junta General de Accionistas del grupo que dicha deuda, que ascendía a cerca de 800 millones de euros a finales del ejercicio 2009, "tiende a cero", aunque precisó que no tiene por qué reducirse necesariamente este año a ese nivel mínimo.

Añadió que el grupo piensa llevar a cabo "métodos combinados" que incluyen "operaciones de varios tipos", como podría ser la venta de activos, para efectuar la reducción.

En cuanto a los dividendos, Del Rivero indicó que la empresa "es partidaria de que se repartan cuando haya beneficios", y recordó que Sacyr decidió no pagar los correspondientes al ejercicio de 2008 porque había tenido pérdidas y prefirió hacer un ejercicio de "prudencia financiera", al tiempo que señaló que este año tampoco se repartirán.

No obstante, apuntó que a la vista de los resultados positivos de 506 millones de euros obtenidos en 2009, "todo parece indicar que, si las cosas funcionan normalmente", el año que viene la empresa reiniciará los pagos.

Destacó que en Sacyr no hay "nadie más interesado que el consejo en repartir dividendos", ya que sus miembros concentran el 70 por ciento del capital, y aseguró que "tampoco hay nadie más interesado en el equilibrio y la fortaleza del grupo" que ellos.

Respecto a los resultados del anterior ejercicio, Del Rivero indicó que la internacionalización del grupo ha sido "un éxito", ya que Sacyr ha logrado adjudicaciones en el extranjero como las obras para la ampliación del Canal de Panamá, por las que había pedido un importe de 3.118 millones de dólares (2.540 millones de euros).

Explicó que el grupo ha obtenido un crédito de 200 millones de euros para financiar la construcción del aeropuerto de Murcia, que le será aportado por un sindicato formado por La Caixa, el ICO, el Banco Espirito Santo, Caixa Tarragona y Caixa Segovia, entre otros.

El presidente de Sacyr valoró el Plan Extraordinario de Infraestructuras (PEI) propuesto por el Ministerio de Fomento y señaló que, a su juicio, la aportación de financiación privada permitirá al Gobierno "no gastar" 5.000 millones de euros, una suma "aproximada a la de los recortes" previstos por el Ejecutivo.