En la sesión, titulada como la transformacion de las Cajas de Ahorros" se han analizado el proceso de recapitalización de las Cajas y cuestiones como las dificultades que ésta plantea en términos de crecimiento y empleo y su encaje en el escenario internacional.
En la mesa redonda, introducida por el director de Economía y Políticas Públicas de FAES, Fernando Navarrete, han participado Juan Velarde, premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales y presidente del Observatorio; el presidente del Centro Internacional de Investigación Financiera del IESE, Juan José Toribio; el presidente de la Comisión de Economía de CEOE, José Luis Feito; y el profesor del IE Businnes School, Fernando Fernández.
Tras un breve recorrido por la historia y evolución de las Cajas de Ahorros, Juan Velarde ha diagnosticado en su intervención que el sector "atraviesa un momento crítico y de corrección severa muy importante que no puede resolverse chapuceramente"; un momento, ha afirmado, en el que "nuestra capacidad crediticia está zarandeada por agentes externos" y en que se debe apostar por un proceso de reestructuración basado en criterios "no de tamaño y sí de eficiencia".
Según Velarde, "los fondos de las Cajas no corren riesgo alguno", algo que, a su juicio, "no se ha explicado correctamente y ha creado un falsa situación de alarma". En su intervención, además, ha subrayado el efecto negativo que ha tenido "la presión de las Comunidades Autónomas y otros organismos, que condujo a las Cajas a inversiones absurdas", y cómo "medidas extraordinarias como las tomadas por Rodrigo Rato han puesto de manifiesto que se han cometido errores de dirección colosales".
Costes sociales
El presidente del Centro Internacional de Investigación Financiera del IESE, Juan José Toribio, ha lamentado que "el caso español ha padecido un retraso evidente en la atención a los problemas de las Cajas de Ahorros" y ha vaticinado que "17 grupos de cajas de ahorros son demasiados y posiblemente están abocados a más fusiones". A su juicio, "la cifra de negocio en España da para menos entidades", de tal manera que, según ha asegurado, "tenemos por delante meses, si no años, de reestructuración del sistema financiero español y en particular de las Cajas de Ahorros, a unos costes sociales importantes".
"Todo esto podría haberse evitado si desde el principio hubiéramos reconocido que el problema financiero español no era inferior al de otros países y, antes de que generara un déficit presupuestario tan importante como el de hoy, hubiéramos dedicado recursos públicos al saneamiento del sistema. Pero me temo que es ya tarde para ello", ha afirmado Toribio.
Contracción del crédito
Por su parte, José Luis Feito ha defendido que "la crisis crediticia no es imputable a los bancos, sino a condiciones externas y al retraso con el que se ha reconocido". "La contracción del crédito se sigue agudizando porque España depende más que otros países de la financiación internacional, porque las economías domésticas españolas están más endeudadas y porque el deterioro de los activos de las entidades les hace incumplir los ratios de capital y solvencia", ha afirmado.
Según Feito, el futuro a corto plazo va a depender "de cómo resuelva España el próximo ataque a la deuda" y "de cómo evolucione un proceso de reestructuración de Cajas que se ha iniciado muy tarde, con los consiguientes sobresaltos, y que no tiene porqué ser sólo entre las cajas o sólo con bancos españoles". Un proceso que ha calificado de "en general bien planteado, dentro de un marco mal orientado".
Feito, a cuyo juicio "es mucho más fácil salir de una crisis de crédito que de una recesión", ha concedido credibilidad a la posibilidad de que la economía española "crezca aun con restricción crediticia, porque hay empresas que pueden autofinanciarse", si bien ha matizado que en esta circunstancia dicho crecimiento será "exiguo y poco intensivo en empleo".
Confianza irrecuperable
Por último, Fernando Fernández,profesor del IE Businnes School, ha subrayado que "el riesgo asimétrico que tiene la economía española es el peso de las cajas, que son el 50 por ciento del sector financiero", y ha afirmado que "la confianza internacional en el modelo de cajas es irrecuperable". "Los mercados internacionales lo que quieren es ver soluciones concretas; qué se va a hacer, cuándo y cuánto va a costar", ha afirmado.
Fernández ha hecho hincapié en que los problemas que afectan al sector financiero español, en términos de balance, tamaño y rentabilidad, "son particularmente agudos en el subsector de las cajas, entre otras cosas porque las cajas han utilizado el ‘boom inmobiliario’ para sustituir a los bancos". Además, ha asegurado, en referencia al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), que "nadie se cree que el sistema financiero español se vaya a recapitalizar con 20.000 millones de euros".
Para concluir, el economista ha urgido a convertir las cajas en sociedades anónimas de forma inmediata "bajo un régimen jurídico especial, con el Banco de España como supervisor, regulador y garante único". En este terreno ha demandado también un calendario obligatorio de privatizaciones para apuntar, a continuación, a las fusiones, que ha considerado "una manera elegante de hacer liquidaciones" dado el exceso de capacidad instalada del sector.