LD (Europa Press) El consejo de la CNE aprobó en sesión extraordinaria su propuesta de orden por la que se establece la tarifa de último recurso (TUR) de gas natural. En esta propuesta, que no es vinculante, el regulador recomendó prorrogar el sistema de actualización vigente para el cuarto trimestre, que supondría un incremento del 5,1 por ciento.
El organismo presidido por María Teresa Costa precisó que al no establecer aún la legislación vigente el procedimiento aplicable para determinar el coste del gas a incorporar en las tarifas de último recurso, y al desconocer los contratos de aprovisionamiento de los suministradores de referencia, considera adecuado plantear tres escenarios para la revisión de la tarifa de último recurso para el cuarto trimestre de 2008.
Estos escenarios pasan por la prórroga de la fórmula establecida a través de Orden Ministerial, por considerar como precio de referencia el resultado de la subasta para la adquisición del gas de operación celebrada el 12 de junio o por fijar como precio de referencia la cotización de los contratos de futuro para el cuarto trimestre de 2008 en los mercados internacionales.
Nueva forma de cálculo
Pero, en su propuesta de orden, Industria establece una nueva fórmula de revisión del término variable de la tarifa de último recurso que supone un aumento del 15,2 por ciento respecto del coste del gas implícito en las tarifas publicadas en la Resolución de 3 de julio de 2008.
Así, en relación al resto de costes, la propuesta de Industria considera un incremento del 1,24% de los peajes implícitos en la tarifas TUR (el precio máximo que pueden cobrar las comercializadoras de último recurso a los consumidores) que, junto con el aumento del coste del gas, produce un incremento conjunto del 9,58 por ciento de la facturación media.
La CNE en la medida en que desconoce los contratos de aprovisionamiento de los suministradores de último recurso, considera que no puede evaluar con exactitud si la fórmula considerada en la propuesta de orden de Industria "refleja las condiciones exactas de aprovisionamiento de aquellos".
Además, la CNE considera necesario insistir en la recomendación de desarrollar los procedimientos regulatorios necesarios para la aplicación del mecanismo de subasta destinada al suministro de último recurso.
El regulador también estima oportuno que el desarrollo del marco regulatorio venga acompañado de una tarifa TUR más restrictiva. En este sentido señala que, de acuerdo con la Directiva Europea, la tarifa de último recurso debe aplicarse únicamente a los consumidores considerados vulnerables.
Así, propone acelerar el calendario de eliminación de tarifas, suprimiendo la tarifa de último recurso para los niveles de consumo superior a 50.000 Kilovatios por hora al año.*Esta medida afectaría a 59.500 clientes, que suman menos del 1 por ciento del total de usuarios que pueden acogerse a la tarifa de último recurso.