LD (EFE) Brasil permitió la inversión extranjera en la exploración y producción de crudo en 1998, cuando el gigante Petrobras reinaba en el país como el único productor. Y aunque la explotación de los pozos corresponde al grupo holandés, la brasileña se lleva una tajada del 20 por ciento.
La segunda petrolera más grande e importante del mundo, el grupo Royal/Dutch Shell Group, declaró en un comunicado que comenzó el bombeo de petróleo en Brasil, lo que significa que se acaba así con medio siglo de dominio en producción petrolera del gigante estatal Petrobras en ese país, según lo señala la agencia Reuters.
El grupo holandés comenzó las operaciones de extracción de crudo el pasado martes en un pozo de la zona de Bijupira e Salema, en la principal base de producción de petróleo del país en la cuenca de Campos. El proyecto, del que Petrobras tiene el 20 por ciento, tiene un costo de 650 millones de dólares, con una producción prevista —en su primera etapa— de 20.000 barriles diarios de petróleo. No obstante, de acuerdo con el comunicado, en cuanto los otros siete pozos comiencen a bombear crudo, el flujo se elevará hasta llegar a los 80.000 bpd y un millón de metros cúbicos de gas natural al día. "Es un importante evento para Shell, así como también para el país", dijo el presidente de Shell Brasil, Aldo Castelli.
Shell adquirió los derechos de Bijupira e Salema desde que el año pasado adquirió a la firma Enterprise Oil. El grupo holandés opera o tiene participación en otros 14 bloques en zonas marítimas profundas de Brasil. El proyecto eleva las operaciones de refinación y mercadeo que ya tiene la compañía en el país más grande de América Latina, en donde la empresa tiene presencia desde hace 90 años.
Brasil permitió la inversión extranjera en la exploración y producción de crudo en 1998, cuando el gigante Petrobras reinaba en el país como el único productor.