Pedro Solbes, alicantino de 67 años natural de Pinoso, ha sido el ministro de Economía del Gobierno de España durante las dos últimas y mayores crisis económicas que ha sufrido nuestro país (la de los 90 y la actual).
La crisis que atraviesa actualmente nuestra economía ha quemado lo suficiente a Solbes como para llegar a decir públicamente que su deseo era salir del Gobierno (lo que logró el pasado mes de abril) e incluso del Congreso de los diputados, tal y como se ha comunicado este mismo lunes.
Durante los gobiernos de González, Solbes fue ministro de Agricultura y de Economía en varios gabinetes. En 1999 se convirtió en comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios hasta 2004, cuando asumió de nuevo la cartera de Economía tras el triunfo de Rodríguez Zapatero en las elecciones generales del 14 de marzo de aquel año, tres días después de los atentados del 11-M.
En la primera legislatura, y pese al fuerte rechazo social que levantó la negociación del Ejecutivo socialista con los terroristas de ETA (la AVT con Alcaraz al frente logró sacar más de dos millones de personas a las calles de Madrid en contra de la negociación), Zapatero se las prometía felices de cara a su posible reelección durante la campaña electoral de febrero y marzo de 2008.
Ya por aquel entonces, la burbuja subprime había estallado al otro lado del atlántico y los mercados financieros comenzaban a tambalearse. A España llegaban las primeras réplicas en forma de una fuerte inflación y caída del crecimiento del PIB, que había estado rozando el 4%. Las previsiones de paro y crecimiento de numerosos organismos internacionales se tornaban más pesimistas y analistas nacionales e internacionales comenzaban a advertir de la importante crisis económica que sufriría España.
Para evitarla, la oposición y los expertos reclamaban medidas a un Ejecutivo empeñado en negar la crisis. El propio Solbes evitó pronunciar dicha palabra con el mismo empeño que la esquivaba el Presidente. Pero para Zapatero y su campaña, Solbes siempre fue la mayor garantía de éxito económico, el que lograría, bajo su mando, alcanzar el “pleno empleo”, entre otras metas.
Durante su última etapa en el Gobierno de Zapatero y la política, Solbes nos ha dejado algunos momentos especialmente significativos. LD recogió todas las perlas del ex ministro. Aquí recordamos algunas de ellas.
Fenómeno "saludable"
El 10 de enero de 2008, los síntomas de la crisis en España eran más que evidentes. Aquel día, Solbes seguía hablando de "desaceleración", no de crisis, y afirmaba que ésta constituía un "fenómeno saludable" que permitía "reequilibrar" algunos componentes del PIB.
"Pasear por los bares de Madrid"
Ese mismo día, después de que la inflación se disparara en plena campaña navideña y diversos analistas internacionales rebajaran las previsiones de crecimiento para España, Solbes quitaba hierro al asunto y decía en sede parlamentaria, que bastaba con "pasear por los bares de Madrid, por las autopistas los fines de semana o por cualquier centro comercial y ver las colas en las recientes fechas para comparar cosas". Por aquel entonces, en plena precampaña electoral, Solbes dijo que no se avecinaba una crisis económica y criticó al PP por ser ver "un escenario catastrofista". Según el reclamo económico del PSOE, íbamos a atravesar una "desaceleración saludable y natural".
En aquella comparecencia, y después de decir que "nada sería peor que adoptar medidas de choque", Solbes señaló que, en cualquier caso, si llegaran las "vacas flacas", las afrontaríamos "con gran tranquilidad" gracias al superávit de las cuentas públicas.
El debate que perdió Solbes
También merece una mención especial el debate que mantuvieron Manuel Pizarro y Pedro Solbes durante la campaña electoral. El número dos del PSOE al Congreso, logró que la prensa del día siguiente le considerara ganador. En cambio, el tiempo acabó dando la razón a Pizarro cuyos argumentos se han demostrado sólidos. Pizarro acertó en sus predicciones y en sus críticas.
"Absurdo" hablar de crisis o de recesión
Más adelante, en junio de 2008, Solbes seguía sin pronunciar la palabra "crisis" aunque se mostraba más preocupado por la situación. No obstante, no tenía problemas en señalar que era "absurdo" insistir en el debate entre "crisis" y "desaceleración". Ya que él entendía por crisis, recesión, y en aquellos momentos el PIB aún no había sumado dos trimestres consecutivos de crecimiento negativo.
Un mes más tarde, cedía y admitía hablar de crisis, aunque se mostraba convencido de que afectará a un "grupo reducido de la población". "Hay mucha gente que restringe el consumo pensando que les va a afectar, no es así", afirmaba Solbes. En su opinión, la crisis sería algo transitorio que iba a afectar poco.
"La peor crisis desde que tengo uso de razón"
Hubo que esperar hasta septiembre de 2008 (sólo tres meses después) para que el ministro de Economía reconociera que se encontraba "ante la peor crisis desde que tengo uso de razón". Por aquel entonces, la administración Zapatero ya tomaba decisiones en el plano económico pasando por encima de los consejos de Solbes. Por ejemplo, cuando planeaba inyectar liquidez en el sector inmobiliario a través del Instituto de Crédito Oficial (ICO). Solbes insistió en que no se podía emplear el dinero de los ciudadanos para tal fin. Finalmente tuvo que ceder.
Fuera del Gobierno
En abril de este año, Zapatero hizo su crisis de Gobierno y otorgó a Solbes la salida del Ejecutivo que le venía reclamando desde hacía tiempo. Este lunes, el ex ministro de Economía se ha convertido también en ex diputado, tras entregar su acta al presidente de la cámara baja, José Bono.