(Libertad Digital) "Yo sé más que Pizarro de gestionar crisis", así titula El Mundo la entrevista que publica este domingo al ministro de Economía y vicepresidente segundo del Gobierno Pedro Solbes. Con el ojo izquierdo aquejado de una infección (que posteriormente sería tratado en el oftalmólogo), el ministro contesta al periodista de El Mundo preguntas sobre las últimas medidas del gobierno, los principales problemas de esta legislatura, su relación con Zapatero o cómo ve a su rival económico en el PP, Manuel Pizarro.
Solbes, con fama de aguafiestas entre el resto de ministros, se ha revelado como el encargado de hacer grande la letra pequeña de la última propuesta de impacto de Zapatero de cara a las elecciones. El presidente prometió que, si ganaba las elecciones, devolvería 400 euros a todos los trabajadores y pensionistas en el mes de junio.
En primer lugar, se destapó que la medida no afectaría al colectivo de los autónomos porque, según palabras del ministro Caldera "es un asunto más complejo". La pasada semana, Solbes señaló que en junio los contribuyentes no recibirían 400 euros sino 200, que es lo que correspondería a la devolución por las deducciones de los 6 primeros meses del año. Desde junio hasta diciembre se iría devolviendo cada mes la parte proporcional hasta completar los otros 200 euros.
Este domingo, en la entrevista que concede al diario al diario de Pedro J, Solbes reconoce que no todos los trabajadores y pensionistas cobrarán al final 400 euros pese a que esa fue la promesa de Zapatero. Sorprendentemente, Solbes explica que es una medida "para todos los que paguen impuestos. Unos se llevarán 400, otros 300, otros 180 y quizá algunos no se lleven nada porque ya están exentos del pago de IRPF". Según explica "para tener derecho a los 400 euros hay que tener esa cantidad de cuota en la declaración". Solbes señala: "Es que no es un cheque que se de a los ciudadanos, es un incremento de la deducción por trabajo".
Preguntado por si es "una de esas medidas de las que usted acepta sin que sea de su preferencia", Solbes no duda, "como siempre, se puede corregir cuando se prepare la norma". También resulta curioso que poco después de defender la devolución de los 400 euros, y explicar que "la decisión se tomó al ver la recaudación de diciembre y la evolución de los ingresos", Solbes señala que, siempre ha sido partidario "de mantener la presión fiscal, pero no forzar una reducción, porque ya es relativamente baja". Para Solbes, "el instrumento fiscal debe ser utilizado para los que pagan impuestos, pero no para los que no los pagan".
En este sentido, el periodista de El Mundo, le pregunta por la propuesta de CIU que él mismo rechazó en el Congreso por inflacionista pese a ser prácticamente igual que el anuncio de los 400 euros de Zapatero. Dice Solbes que "no tiene nada que ver con nuestra propuesta". En su opinión, "CIU planteaba reducir las retenciones cinco puntos y mi crítica era que eso podría tener un impacto inflacionista excesivo". En cambio, insuflar 5.000 millones de euros al consumo le parece "un empujón a la demanda pero no debería tener un impacto inflacionista".
En cuanto a la administración, por un lado dice que habrá un ajuste de gasto pero "preferiría hablar de modernización de la Administración" mediante "la introducción de un modelo más tecnológico".
"Yo sé más que Pizarro"
Las preguntas sobre el fichaje de Manuel Pizarro por el PP no podían faltar. Con el ojo izquierdo guiñado por la infección, Pedro Solbes se muestra convencido de que ofrece mayor credibilidad ante los ciudadanos que su rival en el PP. En su opinión él puede gestionar la crisis mejor que Pizarro porque "yo llevo 40 años preocupándome de los intereses de 40 millones de españoles". Pese a que concede a Pizarro una gran capacidad de gestión tras su paso por Endesa, Solbes señala que "como mínimo, a mí me ha tocado vivir la crisis de 1993 a 1995 y tengo algún conocimiento de la administración".
Tras la gestión de Solbes durante la última legislatura de González, España seguía sumida en una profunda crisis, con cifras espectaculares de paro y destrucción de empleo, así como una importante deuda pública y tipos de interés altísimos. En cualquier caso, Solbes considera que aquella gestión le avala frente a Pizarro y su defensa numantina de Endesa para lograr el máximo beneficio de los accionistas.
En su opinión, "hay un exceso en la presentación de Pizarro como la gran solución y la gran varita mágica para todas las soluciones"
"No respondo a preguntas sobre si pensé dimitir"
Preguntado por las dificultades que se ha encontrado durante esta legislatura con sus compañeros de gabinete así como con la Oficina Económica de Moncloa, Solbes se ha mostrado prudente, pero no ha tenido problemas en dejar claro que hubo complicaciones. Por un lado dice que no ha presentado su dimisión a Zapatero, pero se niega a contestar si lo pensó alguna vez.
Para Solbes uno de los principales problemas que ha tenido durante la legislatura ha sido que todos los temas con impacto presupuestario debían "llegar con tiempo y tranquilidad a la Comisión de Asuntos Económicos" y no se "ha respetado como me habría gustado en algunos temas concretos". Además, explica que "los ministros, por sus propias características, no siempre son conscientes del límite presupuestario". Según explica, "los ministros están para gastar dinero. No les preocupa que las cuentas cuadren".
Sobre su relación con la Oficina Económica de Moncloa, ha explicado que "hay superposiciones que hay que intentar evitar para no dar lugar a tensiones o dificultades". No obstante, ha explicado que "al final, quien tiene que firmar las normas es el ministro de Economía y, por tanto, a él le corresponde tomar las decisiones finales".
Crisis
Solbes también niega que le propusiera a Zapatero adelantar las elecciones aunque reconoce que ya le advirtió en junio que habría complicaciones económicas. Esta fue una de las razones de que redujera su pervisión de crecimiento, primero al 3,3 y ahora al 3,1. No obstante, cuando estalló la crisis, Solbes dijo que el impacto sería muy pequeño y que no afectaría a la economía española.
La pasada semana, con la publicación de la EPA, Caldera atribuyó la caída en el empleo y la destrucción de puestos de trabajo en el sector de la construcción al estallido de las "subprime". Este domingo, Solbes ha reconocido que habrá impactos, "no superiores en España respecto a otras zonas".