LD (José Carlos Rodríguez) Naciones Unidas ha elaborado un informe en el que calcula la productividad laboral de todos los países dividiendo el PIB de cada uno de ellos por el número de trabajadores. Toma datos de 2006, último año para el que hay datos completos. La ventaja de Estados Unidos en productividad media, según el informe, no se puede explicar sólo por el hecho de que allí trabajen más horas. Y es que, si medimos la productividad por hora trabajada, aquél país supera también a todos los demás, excepción hecha de Noruega.
En el país nórdico la productividad laboral por hora asciende a 37,99 dólares, un dato "inflado" por el valor de sus exportaciones de petróleo. Le sigue Estados Unidos, con 35,63 dólares y a este Francia. China y los países del este de Asia, lejos aún de las economías desarrolladas, son las que más se están acercando en productividad a las primeras economías del mundo. Si bien sigue siendo un quinto de la productividad de los trabajadores del primer mundo, se ha duplicado en la última década. Los trabajadores del sur del Sahara sólo son capaces de generar una renta por hora que es una doceava parte de la media de los países desarrollados.
¿Somos los europeos más vagos?
Las productividades por hora de Estados Unidos y de las principales economías europeas no son muy diferentes y sin embargo la renta que genera un estadounidense es en torno a un 30 por ciento superior. ¿Cómo se explica esa diferencia? Simplemente porque trabajan más horas, con una diferencia que también ronda el 30 por ciento. Son más ricos porque trabajan más horas. Así, los estadounidenses trabajaron de media 1.804 horas a lo largo de 2006 por las 1.564 de Francia o las 1.407 de los noruegos. Eso no ocurría en los años 70'; entonces trabajábamos las mismas horas. ¿Nos hemos vuelto vagos los trabajadores europeos?
La diferencia no se explica por una diferente actitud hacia el trabajo sino por una respuesta lógica en ambos casos, el de Estados Unidos y Europa, a los incentivos que hay al trabajo. Un reciente artículo publicado por los economistas Claudio Michelacci y Joseph Pijoan-Mas, del Centro de Estudios Monetarios y Financieros.
Ahí el trabajo está mejor valorado
Los dos autores recaen en que "En los 1970' el número medio de horas trabajadas per capita era ligeramente mayor en países europeos tales como Francia, Italia y Alemania que en los Estados Unidos. Hoy los americanos trabajan alrededor de un 30 por ciento más que los europeos".
¿Por qué se ha producido esa diferencia? Según sugiere el artículo es porque en Estados Unidos un trabajador puede progresar mucho más. Lo que en otros sitios se llama desigualdad de rentas se parece más a una escalera con más peldaños. "Hay más oportunidades de subir en la escalera profesional". Además en esa carrera los estadounidenses no tienen parones involuntarios. "La tasa de desempleo ha aumentado en Europa" desde los 70', "pero no en los Estados Unidos".
Pero puede haber más razones que las apuntadas en el artículo de Claudio Michelacci y Joseph Pijoan-Mas. El economista Edward C. Prescott, que fue reconocido con el premio Nobel de Economía en 2004, ha insistido en la relación entre la fiscalidad sobre el empleo (seguridad social e IRPF) y el número de horas destinadas al trabajo.