(Libertad Digital) Los datos correspondientes al mes de enero ofrecidos por el Ministerio de Trabajo arrojaron un incremento de más de 132.000 parados, 8.930 de ellos en el sector de la construcción, así como una pérdida de más de 85.000 afiliados a la Seguridad Social. En declaraciones a la Cadena Ser recogidas por Europa Press, Caldera aseguró que los últimos repuntes del paro de deben a una "afectación" en un sector concreto, el de los servicios inmobiliarios, "que ha tenido un comportamiento bastante virulento".
Así, indicó que esta situación ha imputado un número de desempleados "bastante importante" en los meses de diciembre y en enero, y que seguramente lo hará en febrero, si bien Caldera afirmó que esta destrucción de empleo "se está moderando". Además, explicó que la creación de puestos de trabajo durante los meses de diciembre y enero no pudo absorber el total de nuevos demandantes de empleo, de ahí el incremento del número de parados. En este sentido, Caldera se mostró convencido de que la Encuesta de Población Activa del primer trimestre del año reflejará "creación de empleo".
Mientras Caldera augura una moderación en el ritmo de destrucción de empleo registrado en la construcción, la oficina estadística comunitaria, Eurostat, afirma en un comunicado que España fue el país de la UE en el que más descendió la construcción el pasado mes de diciembre en términos interanuales, registrando un retroceso del 9,5 por ciento, solo por detrás de Reino Unido, que sufrió una contracción del 12,7 por ciento. En la Eurozona, la producción de la construcción descendió un 3,3 por ciento en diciembre en términos interanuales y un 4 por ciento en la Europa de los 27, respectivamente.
Además, según indica un informe de la firma de análisis de sectores DBK, las mayores constructoras obtuvieron en 2007 más de la mitad de sus ingresos totales (55,9 por ciento) de actividades ajenas al sector, hacia las que han ido diversificando su actividad en años anteriores, y más de un tercio (el 35 por ciento) del mercado exterior. La firma considera que las constructoras seguirán orientadas en los próximos ejercicios a su diversificación y a salir al exterior, ante la desaceleración de la actividad constructora en el mercado doméstico.
Según DBK, el crecimiento de la facturación del sector se desacelerará en los dos próximos años (2008-2009) hasta situarse entre el 9 por ciento y el 10 por ciento, frente al incremento del 14 por ciento que registrarán en el ejercicio 2007. Así, estima que en el horizonte de 2009, el conjunto del sector reducirá hasta una media el 79 por ciento el peso del negocio constructor en su facturación total, y que el 20% restante procederá de otras actividades. Asimismo, los ingresos en el extranjero supondrán alrededor del 16 por ciento del total.