LD (Europa Press) La aerolínea, cuya negociación en bolsa se mantuvo suspendida ayer durante toda la sesión, aseguró que el Ebitdar será "previsiblemente inferior" a la cifra de entre 23 y 42 millones que indicó a principios de agosto, y aunque espera que sea positivo, "no puede descartar un Ebitdar negativo". A principios de año la previsión de Ebitdar era de 90 millones de euros. Además, la empresa comunicó la cancelación de un crédito fiscal que le ha llevado a modificar sus resultados del primer semestre, "aumentando la pérdida del periodo y disminuyendo los fondos propios".
Según indicó a Europa Press el analista de Atlas Capital Jordi Padilla, Vueling "no es una compañía para inversores conservadores, ya sólo lo es para inversores muy agresivos y con un nivel de riesgo elevado". Recordó que este año la empresa, creada hace tres años, tenía que entrar en beneficios en el ejercicio en curso. Padilla remarcó que desde su creación Vueling nunca ha obtenido beneficios. "Hasta ahora tiraba de caja y a mediados de mayo se produjo una caída de la ocupación ante la guerra de precios y de rutas lanzada por Ryanair y easyJet", agregó.