La llegada de Rubalcaba a la vicepresidencia del Gobierno ha dado un impulso a la relación de afinidad que tradicionalmente ha tenido el Grupo Prisa con el PSOE, en detrimento de la corporación mediática de Roures, que ha pasado a un segundo plano con el desembarco del nuevo superministro portavoz del Ejecutivo.
Sólo desde este punto de vista se comprende el enfoque informativo que da hoy el diario económico de Prisa, Cinco Días, a la intervención de Zapatero ante los empresarios. Hoy, además, es un día sensible, ya que una misión de Bruselas llega a España, tras pasar por Portugal, para analizar nuestra situación económica justo cuando en el seno de la UE se debate ampliar el fondo de rescate para salvar a España cuando caiga Portugal.
Cinco Días titula a toda página: "Zapatero refuerza su cruzada reformista" y viste a Zapatero de hombre de Estado preocupado por el futuro de un país que ha llevado a la "modernización económica". Según el diario el presidente tiene una "fiebre reformista" a través de la cual va a aumentar la confianza de los inversores en la economía española y va a lograr que los fantasmas de la suspensión de pagos desaparezcan de los pasillos del Ministerio de Economía.
"Sistema financiero y comunidades autónomas, quizás las fibras más sensibles en las que sigue focalizándose la atención de los mercados, fueron objeto de especial atención por parte del presidente del Gobierno en la presentación de su informe económico anual. José Luis Rodríguez Zapatero apremió a las cajas de ahorros a mejorar cuanto antes su estructura de capital y advirtió a las comunidades que el Gobierno adoptará las medidas necesarias para afrontar cualquier desviación en sus ajustes de gasto". ¿A qué se quedan ustedes mucho más tranquilos?
Esperemos que la delegación de nueve eurodiputados de la Comisión Especial sobre Crisis Financiera, Económica y Social del Parlamento Europeo lean Cinco Días al llegar a Madrid con el fin de analizar la situación económica española. Cuando vuelvan a Bruselas elaborarán un informe que posteriormente será votado por el pleno de la Eurocámara. La delegación, que ha visitado previamente Portugal, está presidida por el eurodiputado alemán Wolf Klindz. Como descubra las trampas estadísticas del déficit público español nos podemos ir preparando para lo peor.
Y en medio de esta marabunta informativa, resulta que "la UE negocia ampliar el fondo de rescate para países en crisis". Tras el fracasado intento de lograr aumentar el paquete financiero de 750.000 millones por la oposición de Alemania, los partidarios de este incremento vuelven a la carga en la reunión del Comité Económico y Financiero (expertos nacionales) para preparar el Eurogrupo (Consejo de Ministros de Economía y Finanzas de la zona euro) del próximo lunes.
Según explica Cinco Días "sobre la mesa figuran tanto la posibilidad de ampliar el Fondo como la de flexibilizar su utilización, para permitir que no solo emita deuda para socorrer a un país, sino que también pueda comprar directamente obligaciones de los países en dificultades antes de que se vean obligados a pedir el rescate".
Es decir, que el dinero de los contribuyentes serviría para comprar directamente deuda de países que no pudieran colocarla en el mercado a un precio asequible para sus maltrechas arcas. Y esta deuda deberá ser devuelta -con intereses- por los contribuyentes del país rescatado. Y los políticos y los banqueros se van de rositas, como está mandado en una partitocracia socialista financiada con el oligopolio financiero. ¿Y el libre mercado? Como Alfonso Armada, ni está ni se le espera.
El diario Expansión prefiere ir directamente al meollo del problema: el agujero del sector financiero y los problemas de algunas entidades para devolver el dinero que deben a sus acreedores. En portada destaca que "la crisis de deuda cierra la financiación de la cajas". Necesitan 30.000 millones de euros este año y no se sabe de dónde los van a sacar.
El Economista se une al salmón de Unidad Editorial y apunta que "la banca debe pagar la mitad de su deuda del año antes de abril": afronta vencimientos por 41.000 millones, casi la misma cantidad que el Tesoro, en plena escalada de precios de los bonos.
Y hablando del Tesoro, su directora, Soledad Nuñez, va a iniciar una gira mundial con el secretario de Estado de Economía, José Manuel Campa, para buscar compradores a los 200.000 millones de euros de deuda que va a emitir el Reino de España este año. Ellos lo llaman road show, y nosotros, pasar la gorra, como hacen los mendigos del metro después de destrozar una pieza musical con un acordeón.