La gran estrella invitada del Día de España en la Expo es la Copa del Mundo que no deja de ser fotografiada por los visitantes chinos y que está custodiada en una vitrina en la plaza del pabellón español todo el día.
Para el presidente español "la destacada presencia en esta Exposición pone de manifiesto el interés de España por reforzar los vínculos y la cooperación con China, un país clave en el mundo del Siglo XXI".
Zapatero destacó el privilegiado escaparate para poner en valor a las empresas y las marcas españolas, además de la excelente oportunidad que supone para España la presencia en la Expo de Shanghai.
El pabellón español es uno de los más visitados en la Expo, con 1 millón de personas cada 25 días, una cifra que para Zapatero transmite la imagen de España como un país plural, moderno, rico en tradiciones y a la vez volcado en la innovación y en los avances tecnológicos.
La Exposición Universal de Shanghai es el segundo acontecimiento de alcance mundial, tras los JJOO de Pekín de 2008, en el que China ha mostrado su capacidad de organización y su voluntad de integrarse plenamente como actor principal en el escenario internacional, resumió el presidente. El Día de España contó con el izado de la bandera y la interpretación del himno nacional en el Centro de Exposiciones, además de un concierto de guitarra.
España con un pabellón propio de 7.000 metros cuadrados, con un coste de 12 millones de euros, es uno de los cinco mayores junto con Francia, Reino Unido, Alemania e Italia. En total, "el cesto español" tiene 25.000 tubos de acero que soportan más de 8.500 placas de mimbre.
En el viaje a China, que incluye paradas en Pekín y Shanghai, Zapatero está acompañado del ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos; el de Industria, Miguel Sebastián; y la de Ciencia y Tecnología, Cristina Garmendia.
Mañana en Pekín, el presidente del Gobierno mantendrá un encuentro con el primer ministro chino, Wen Jiabao, antes de partir rumbo a Japón el miércoles en la que será su primera visita oficial.
Zapatero estará de vuelta en España para la fiesta sindical de Rodiezmo (León) que se celebra el domingo 5 de septiembre, aunque este año anunció que no acudiría a la cita por "respeto a la posición y el discurso de UGT".
La fiesta minera que organiza el sindicato SOMA-UGT no contará finalmente con ningún miembro de la dirección del PSOE, aunque sí lo hará es Alfonso Guerra, quien confesó que: "A mí me han invitado, y donde se me invita yo voy".