Menú

Nadie en Panamá pregunta al Gobierno por Cataluña

Brufau niega que le hayan preguntado, pero opina sobre la cuestión: "Hay que sentarse", dice, para que al final "ganen los dos".

"Hemos hablado de política, de política económica". Cataluña no existe ni en las reuniones a alto nivel ni tampoco en los corrillos de los empresarios a fin de captar nuevas inversiones. La amenaza secesionista "no es un asunto que haya llegado a la cumbre", resumió Jesús Terciado, número dos de la CEOE. El Gobierno lo confirma: "No ha habido ninguna referencia".

Así, mientras en España la cuestión catalana ocupa el debate político, en el foro económico previo a la Cumbre Iberoamericana no se transmitió preocupación alguna. "En los contactos previos", aseguró José Manuel García Margallo, nadie le abordó "por la cuestión catalana". Terciado lo corroboró así como el responsable de Repsol, que sorpresivamente se refirió a la cuestión.

A Antonio Brufau le preguntaron, concretamente, si al tejido empresarial le preocupa una hipotética ruptura del país. "Espero que prevalezca el sentido común", contestó sin entrar de lleno en la cuestión. Si bien, se sumó a la estrategia del Gobierno del diálogo e, incluso, fue un paso más allá: "Cuando hay dos con discrepancias, lo que hay que hacer es sentarse" para que, al final, "ganen los dos", fue su breve análisis ante los periodistas.

Las fuentes consultadas definieron el órdago secesionista como una "cuestión doméstica" y, de ahí, que en los foros internacionales ni tan siquiera se mencione. Los españoles que tomaron la palabra -desde el príncipe a destacados empresarios- hicieron suyo el mensaje de la recuperación que, desde hace ya algunos meses, vende Mariano Rajoy en sus viajes extranjeros.

Del "optimismo moderado" del citado Brufau a "las bases que refrendan" la mejoría que destacó Terciado. Si bien, fue don Felipe el que defendió con más vehemencia una España que "está encontrando su camino". "Para finales de este año, se espera que volvamos a la senda de crecimiento y que esa tendencia se consolide en el 2014", fue su diagnóstico.

Gobierno y Zarzuela se afanaron por transmitir la idea de un país a pleno rendimiento que espera de las inversiones de América Latina, sin rastro de interrogantes sobre Cataluña. Sin embargo, los españoles sí volvieron a poner encima de la mesa sus exigencias en relación a la seguridad jurídica. Brufau reconoció la volatilidad en algunos países de la región y recordó los casos de Venezuela y Bolivia. En ambos casos "no tuvimos oportunidad de discutir los planteamientos del Gobierno" y acabó "con una expropiación", destacó ante empresarios americanos y medios de comunicación internacionales. Juan Miguel Villar Mir, de OHL, se sumó a la petitoria de una mayor seguridad.

Temas

En España

    0
    comentarios