Desde todos los primas posibles -economía, derecho, historia y cultura-, la Fundación FAES acudió a Barcelona para hacer pedagogía y desmontar los argumentos esgrimidos por el secesionismo. "El nacionalismo cree que su designio es administrar las esencias, cuando lo que tiene que plantearse es cómo asume la pluralidad", dijo Javier Zarzalejos, su secretario general.
No es sólo que el laboratorio de ideas del PP haya desembarcado Barcelona -desde hace meses, organiza encuentros discretos en la ciudad condal en los que han participado destacados profesores, juristas, empresarios, políticos o economistas- y haya utilizado su habitual firmeza en el discurso, sino que presentó un amplio documento -117 páginas, recopilación de las ponencias de sus seminarios sobre la materia- en el que se aborda con profundidad el proyecto de ruptura y se da respuesta a cuestiones clave sobre el mismo.
Así, el mismo día que Mariano Rajoy acotaba el diálogo posible en la sede de la soberanía nacional, la fundación que dirige José María Aznar ofrecía su diagnóstico en el Círculo Ecuestre de la capital catalana. Si bien, de momento, el expresidente sigue sin cerrar un acto en Cataluña.
Secesión y derecho internacional
"El derecho comunitario y el funcionamiento institucional de la UE contienen un verdadero régimen antisecesión, desde un punto de vista jurídico y político", se puede leer en el capítulo internacional que corre a cargo de Jean Monnet José María Areilza, titular de la cátedra Jean monnet, y el letrado Leopoldo Calvo-Sotelo, entre otros. "La propia evolución de la integración europea vacía de sentido la idea de la secesión de un territorio dentro de un Estado miembro", aseguran, no sin poner hincapié en "las posibles dificultades y esperas" de aquellos que optan por la ruptura.
Los proyectos independentistas "están construidos sobre una premisa falsa, porque el derecho a decidir no existe con carácter general ni en el orden interno de los Estados ni en el Derecho Internacional", según el catedrático Carlos Fernández de Casadevante, que también colabora en este apartado.
Consecuencias económicas
En el capítulo económico, desde FAES se insiste en analizar las balanzas fiscales como un ejemplo claro "de propaganda engañosa de los nacionalistas". Así lo sostiene Gabriel Tortella, catedrático de Historia. "La unión con España le ha ido muy bien económicamente a Cataluña", asegura. "Que la secesión acarrearía costes muy elevados a los ciudadanos y empresas en Cataluña como resultado de la desintegración del mercado español y la salida de Cataluña de la UE y la Eurozona es una conclusión que solo cuestionan algunos economistas bajo el influjo del virus de la independencia",opina el también catedrático Clemente Polo.
Aspectos jurídicos
El director de Constitución e Instituciones de FAES, Ignacio Astarloa, defiende que "el proceso está concebido como un proceso de enfrentamiento" en el que "se ponen en ejecución con total determinación unas vías que no tienen salida posible, pero trasladando la convicción de que el destino de esa comunidad es su secesión y de que avanzando hacia ese objetivo se irá ampliando progresivamente el apoyo social a la creación de un Estado propio". "Se tacha a cualquier oposición al proceso en nombre de la ley de ‘solución autoritaria’. Y se anuncia abiertamente el incumplimiento de la ley", indica, según recoge FAES en un comunicado.
"A la situación presente se ha llegado porque algunos vienen levantando en los últimos años una sucesión de falsas expectativas que ellos mismos convierten en agravios y en el consiguiente sentimiento colectivo de decepción", dice Astarloa. A su juicio, la consulta "puede provocar en la opinión pública una nueva frustración colectiva multiplicada hasta extremos cada vez más dolorosos y peligrosos para todos".
Nacionalismo populista
Un nacionalismo "low cost", titula el escritor Miquel Porta Perales, que asegura "fomenta la engañosa ilusión de un futuro mejor; abusa del victimismo; complica los problemas en lugar de buscar soluciones; selecciona los datos a conveniencia para demostrar el expolio fiscal que padecería Cataluña; pervierte el sentido de la democracia cuando habla del derecho a decidir, y tergiversa el derecho internacional para hacer creer que una Cataluña independiente formaría parte de la Unión Europea y tiene derecho a la autodeterminación". Y aún añade: "el derecho a decidir tal y como lo plantea el nacionalismo catalán no existe".
"Se está elaborando un discurso histórico oficialista para satisfacer los requerimientos del poder dominante, que solo utiliza la memoria en la medida que le interesa", según Ricardo García Cárdel, catedrático de Historia.
Esta nueva publicación FAES -que incluye más autores- se suma a otras que se han difundido en los últimos meses para dar respuesta a la ofensiva de Artur Mas como '20 preguntas con respuesta sobre la secesión de Cataluña' o 'El mito fiscal. Razones para un debate'.