Por fin tenemos en nuestras manos Singularity, la última obra de los veteranos estudios Raven Software. En los últimos meses apenas se ha comentado nada acerca de este título, pero lo cierto es que nos encontramos ante una de las sorpresas del año, uno de los llamados sleepers.
Todo dará comienzo durante la guerra fría, en la isla Katorga-12, donde Stalin decide investigar un material denominado E99, una nueva fuente de energía que puede dar un vuelco al transcurso de la guerra. Sin embargo, en 1955 ocurre un desastre y las miles de personas que habitaban la isla fallecen. El título nos sitúa en el año 2010, cuando nuestro protagonista, un marine americano, acude en helicóptero junto a otros compañeros a investigar la isla. A partir de ahí, se desencadenarán una serie de acontecimientos además de ciertos viajes en el tiempo, pero preferimos no desvelaros nada para que lo podáis descubrir por vosotros mismos. Os aseguramos que la historia está muy bien enlazada, y consigue enganchar al jugador de principio a fin. Por otra parte, podemos ver que ciertos títulos como Bioshock han ejercido una gran influencia sobre este, por lo que si os gustó el paso por Rapture, probablemente os gustará el paso por Katorga-12.
Más allá de un simple shooter con un buen elenco de armas y un sistema de coberturas tradicional, nos encontramos con el "Dispositivo de Manipulación del Tiempo", que nos permitirá dar saltos en el tiempo, envejecer o reconstruir determinados objetos, etcétera. De nuevo no queremos estropearos las sorpresas, pero os garantizamos que entre éste dispositivo y la gran variedad de armas, nos enfrentaremos a combates muy variados y divertidos. Por otra parte, también se le ha dado uso para solucionar algunos puzzles, como puede ser reconstruir una determinada estructura que nos permita progresar en la aventura. En total nos encontraremos con una campaña que durará unas 10 horas y donde la diversidad de combates y situaciones garantizará una constante diversión.
Respecto al modo multijugador, además de los modos clásicos, incluye alguno bastante novedoso como Criaturas vs. Soldados, donde se formarán partidas caóticas y que resultarán tremendamente divertidas. Por lo demás, nos encontramos ante un multijugador del montón que probablemente en unos meses estará desierto, y es que a pesar de la experiencia de Raven Software en este campo, han centrado todos sus esfuerzos en la campaña, decisión que a nuestro parecer resulta muy acertada.
En cuanto al apartado técnico se refiere, nos encontramos de nuevo con Unreal Engine 3, por lo que algunos elementos nos resultarán familiares. Sin embargo cabe destacar que se ha optimizado para que se mueva con total fluidez en las tres plataformas, además de contar con una iluminación sobresaliente. Donde sí destaca es en la parte artística, ya que cada rincón está perfectamente recreado, mostrando cientos de pequeños detalles, cosa que nos recuerda enormemente a Bioshock. Cabe destacar que el título nos ha llegado perfectamente doblado al castellano, algo que hoy en día es de agradecer. La banda sonora por su parte ni destaca ni se queda corta, ya que sirve perfectamente de acompañamiento al jugador en los momentos necesarios.
En resumen, nos encontramos ante un título variado y divertido, donde la variedad de combates y situaciones son los protagonistas, unido al uso notable del Dispositivo Manipulador del Tiempo. Por otra parte, la excelente dirección artística y el correcto doblaje al castellano cierran la función junto al destacable modo multijugador. Si os gustan los shooters, y más aún si son con una buena ambientación, no perdáis más el tiempo y acercaros a vuestro distribuidor favorito a comprar Singularity.
